Embarazo: ¡lo que deben saber las embarazadas!

El embarazo es todo el tiempo comprendido desde el momento de la concepción, cuando el óvulo fecundado por el espermatozoide se implanta en el útero de la mujer, hasta el momento del parto, cuando el bebé nace.

Un embarazo normal y a término dura 38 semanas a partir de la fecha de la ovulación. Sin embargo, para facilitar el cálculo, los profesionales suman 40 semanas al primer día de la última menstruación para determinar una posible fecha de parto.

El embarazo es una etapa en la que necesitas más información que nunca. Por eso, nos encantaría acompañarte en tu embarazo desde los primeros síntomas, en todos los trimestres y en todas las semanas de embarazo.

Primer trimestre de embarazo (de la semana 1 a la semana 12) 

Cuando el embarazo se confirma, ya estás en el primer trimestre de embarazo. Tranquila, estamos aquí para ayudarte, orientarte y acompañarte con los temas que más te interesan. Pero, sin duda, la ginecóloga o ginecólogo que te acompañen en este primer trimestre de embarazo serán los profesionales que te darán las indicaciones precisas, que deberás seguir al pie de la letra.

En primer lugar, debes saber que la concepción se produce unas dos semanas después de la última menstruación. Por tanto, para calcular la fecha probable de parto, se añaden 266 días al día de la concepción.

Sin embargo, como es muy difícil conocer la fecha exacta de la concepción, la fecha probable de parto se suele calcular también sumando 280 días (40 semanas) a la fecha del inicio de la última regla, si tu ciclo es regular, de 28 días.

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Desarrollo del feto en el primer trimestre de embarazo

Este primer trimestre de embarazo empieza cuando se produce la concepción, es decir, cuando el espermatozoide y el óvulo se unen en una de las trompas de Falopio y dan lugar al cigoto, una entidad unicelular. El cigoto consta de 46 cromosomas (23 de la madre y 23 del padre) que determinan el sexo del bebé, los rasgos físicos o las enfermedades hereditarias, etc.

Después, el cigoto se desplaza por la trompa de Falopio hacia el útero, mientras se divide formando una bola de células que recibe el nombre de blastocito. El blastocito es el que se implanta en el endometrio y dentro de él están las células que darán lugar al embrión. Cuando se produce la implantación aumentan las hormonas, como los estrógenos y la progesterona, que hacen que el embrión empiece a formarse.

(Te interesa: Qué sucede cuando se produce la implantación del óvulo)

Esto es lo que le sucede al feto en el primer trimestre de embarazo:

• Se forman sus orejas, el labio superior, la nariz y los ojos con sus párpados.
• Se forman sus extremidades: primero, serán unos bultitos, más adelante como unas paletas y después ya empezarán a sobresalir sus deditos, sus codos, que en este primer trimestre ya podrá flexionar, e incluso sus uñas.
• Su cabeza es grande, pero se está redondeando.
• Se cierra el tubo neural a lo largo de la espalda de tu bebé, y el tronco y el cuello empiezan a enderezarse.
• También empiezan a formarse el corazón y otros órganos, como los genitales externos del bebé o los intestinos.
• El cordón umbilical se aprecia claramente y aparecen los brotes dentarios para los futuros dientes.

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Cambios en la mujer en el primer trimestre de embarazo

Por tu parte, la futura mamá empezará a experimentar los primeros síntomas de embarazo. Náuseas, cansancio, somnolencia, estreñimiento, ardor de estómago, etc.

SI QUIERES CONOCER TODOS LOS SÍNTOMAS DEL EMBARAZO, ENTRA EN ESTE ARTÍCULO.

Segundo trimestre de embarazo (de la semana 13 a la 28) 

En este segundo trimestre de embarazo, el bebé sigue desarrollándose y dará un gran estirón, tanto que tu abdomen aumentará de tamaño.

Desarrollo del feto en el segundo trimestre de embarazo 

Esto es lo que le sucede al feto en el segundo trimestre de embarazo:

• No te extrañes si en alguna ecografía tu bebé se está chupando el dedo. Es que, en este segundo trimestre, se está desarrollando el reflejo de succión.
• Ya empezarás a notar los movimientos de tu bebé, primero como un ligero aleteo y después ya notarás que algo se está moviendo de verdad ahí dentro.
• Todo su cuerpecito se cubrirá con una sustancia grasa, llamada vérnix, que le ayudará a protegerse.
• Ya tiene cejas y, aunque sus párpados sigan cerrados, mueve sus ojitos.
• Sus oídos ya se han afinado mucho y escucha el exterior, incluyendo la voz de mamá y papá, desde la pancita. 

Cambios en la mujer en el segundo trimestre de embarazo 

Mami, lo más emocionante de este segundo trimestre de embarazo es que, entre las semanas 18 y 20 de embarazo, te harán una ecografía y, si se deja ver, podrás conocer el sexo de tu bebé.

En este segundo trimestre, seguramente, también te encontrarás con más energía. Ya no tienes las molestias de los primeros síntomas de embarazo y aún te sientes ligera por el peso de la pancita.

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Tercer trimestre de embarazo (de la semana 29 a la 40 de embarazo) 

¡Ya estás en la recta final del embarazo! ¡Pronto te encontrarás con tu pequeño bebé!

Desarrollo del feto en el tercer trimestre de embarazo 

Esto es lo que le sucede al feto en el tercer trimestre de embarazo:

• Tu bebé sigue creciendo y creciendo. ¡Y cada vez tendrá menos espacio para moverse!
• Ya puede abrir y cerrar los ojos.
• También desarrolla una capa de vello muy fino, denominada lanugo (que puede no desaparecer del todo al nacer); a algunos bebés les empieza a salir pelo en la cabeza.
• Sus órganos siguen perfeccionándose y preparándose para el nacimiento.
• Puede que tu pequeño se coloque con la cabeza hacia abajo para poder salir por el canal del parto. Y es que esto no les pasa a todos los bebés, pues algunos se presentan de pie o de nalgas…
• Pero, sobre todo, lo más importante que ocurrirá en este tercer trimestre es que podrás, por fin, conocer a tu queridísimo y esperado bebé.

Cambios en la mujer en el tercer trimestre de embarazo 

Estas son algunas de las cosas que pueden suceder a la mujer en el tercer trimestre de embarazo.

• Se acerca el momento del parto y, seguramente, te tendrán que hacer las pruebas rutinarias pertinentes.
• Puede que también notes que tienes más ganas de hacer pipí, debido a que el bebé presiona la vejiga.
• Puedes sentir que te cuesta un poquito respirar y que te cansas enseguida, porque el bebé, ya muy grandote, está presionando el diafragma.
• Si aún no lo has hecho, ya tendrás que ir preparando las cositas para tu bebé. ¿Qué tal hacer una Baby shower?
• Si notas que te da por ordenar toda la casa y limpiarla como no si no hubiera mañana, no te preocupes. Se trata del síndrome del nido y consiste en la necesidad que tienes de preparar tu casa, el nido, para la llegada de tu bebé.
• En este tercer trimestre, muchas mujeres tienen los pies y las piernas muy hinchados, debido a la retención de líquidos (consecuencia de los cambios hormonales) y al aumento de peso.
• Infórmate y estate atenta a los síntomas y señales de parto: contracciones, expulsión del tapón mucoso, ruptura de la fuente, borramiento del útero, etc.
• Hasta que no llegue el momento del parto, procura descansar. Recarga energía, porque la necesitarás más adelante, cuídate y deja que te cuiden.
• ¡Y, sobre todo, suponemos que ya tendrás elegido el nombre del bebé! Si no, es el momento de pensarlo y decidirlo.

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Mujer embarazada: ¿qué hacer si el test dio positivo?

Si el test de embarazo da un resultado positivo, lo primero que debes hacer es sacar cita con la(el) ginecóloga(o) para tu primer control.

• Esta cita se realiza entre la semana 6 y la semana 9 de embarazo, siempre contando desde la fecha de la última menstruación. Y es que acudir antes es poco aconsejable, ya que difícilmente el examen ecográfico podrá obtener información útil del embrión, que aún es muy pequeño.
• Programa una cita en tu centro atención primaria, con la(el) ginecóloga(o) que te asignen.
• También puedes hacerlo con tu médico de cabecera, quien te indicará todos los pasos que debes dar para iniciar tu proceso de control y seguimiento del embarazo sano.
• Cuando ya tengas la cita con la ginecóloga, debes seguir todas las indicaciones que te den, en cuanto a cuidados, alimentación, suplementos, análisis de sangre y orina, eliminación de malos hábitos, etc.

(Te interesa: Calculadoras del embarazo)

Durante esta primera cita, la ginecóloga realizará:

• Una ecografía vaginal para confirmar la presencia del saco amniótico.
• Elaborará tu historial clínico.
• Determinará la fecha probable de parto.

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Principales exámenes del embarazo

Cuando confirmas que estás embarazada, también da comienzo una larga lista de pruebas, análisis y exámenes en el embarazo. 

En cada trimestre del embarazo, están contemplados unos análisis de sangre y de orina, con el fin de detectar posibles carencias que puedan afectar a la salud de la mamá o comprometer el desarrollo del feto. Pero, además, cada trimestre de embarazo comporta una serie de exámenes específicos.

Los exámenes prenatales a los que deben someterse todas las mujeres embarazadas más comunes y generalizados son los que enumeramos a continuación.

Por supuesto, si se da algún problema específico durante el embarazo, la(el) ginecóloga(o) que sigue la gestación podría indicar exámenes más específicos para la situación concreta.

Análisis de sangre y orina

• La mujer embarazada debe someterse a una analítica específica del embarazo en cada trimestre. Es importante detectar a tiempo posibles infecciones que pueden dañar al feto en sus primeras fases del desarrollo, así como para descartar posibles enfermedades.
• Estas son algunas de las posibles enfermedades que detectan los análisis de sangre de la mujer embarazada: toxoplasmosis, rubeola, VIH y hepatits B, por ejemplo.
• Con la analítica sanguínea también se controla que los valores básicos están en orden durante el embarazo. Por ejemplo, sirven para detectar si la futura mamá sufre anemia por carencia de hierro, o bien si sufre alguna otra carencia que pueda subsanarse con suplementos específicos.
• El análisis de orina es uno de los exámenes más importantes del embarazo, puesto que permite controlar la posible presencia de proteínas en la orina, en particular, la albúmina. En caso positivo, la mamá podría estar sufriendo una preeclampsia, una enfermedad caracterizada por un aumento de la presión arterial que puede provocar graves complicaciones en el embarazo. Si se detecta a tiempo, la enfermedad puede mantenerse bajo control.

Ecografías del embarazo

La ecografía es la prueba más importante para ver si todo marcha bien después de un test positivo de embarazo, así como durante el seguimiento de todo el embarazo. A través de esta prueba basada en ultrasonidos que devuelven imágenes del feto y el interior del vientre materno, se verifica que este proceso complejo y maravilloso evoluciona de manera correcta.

Según el protocolo de la SEGO (Sociedad Española de Ginecología y Obstetricia) y otras sociedades científicas, deben realizarse, al menos, tres estudios ecográficos durante la gestación.

Primera ecografía o ecografía de la semana 12 

Para hacer la primera ecografía deberemos esperar entre la semana 11 y el final de la semana 13 de gestación.

Entre otras cosas, en esta ecografía se comprueba:

• El número de fetos y desarrollo del mismo.
• El latido cardiaco fetal.
• La ubicación de la placenta.
• La medición del feto para ajustar las semanas de gestación.
  (Te interesa: Tabla de percentiles de crecimiento del bebé y del feto)
• La medición del pliegue nucal, que nos permite detectar la posible presencia de alteraciones cromosómicas como el Síndrome de Down, que, no obstante, no se diagnostican con la ecografía, sino con otra serie de exámenes que comentaremos más adelante.

Ecografía del segundo trimestre

Se llama ecografía morfológica y se efectúa a las 20 semanas de embarazo. Es la más importante, puesto que sirve para confirmar que el feto evoluciona correctamente en el desarrollo físico y en el de todos sus órganos internos.

Ecografía del tercer trimestre

Sirve, fundamentalmente, para hacer un seguimiento del feto, ver cómo está colocado y comprobar su peso y su bienestar.

Triple screening, cribado prenatal, amniocentesis

El triple screening o triple test es una prueba de cribado que se efectúa durante el primer trimestre de embarazo para detectar posibles alteraciones genéticas del feto como: Trisomía 21 o Síndrome de Down o Trisomía 18 o Síndrome de Edwards.

Se realiza a través de una muestra de sangre de la futura mamá y se tienen en cuenta tres datos: la edad de la madre, los niveles de dos proteínas fabricadas por la placenta (la beta-hCG libre y la PAPP-A) y los datos obtenidos de la ecografía de la semana 12 (CRL o medida cráneo-caudal, y la translucencia nucal).

El triple screening o triple test no es una prueba concluyente, sino que mide una probabilidad.

En función de los resultados del triple screening, la ginecóloga puede recomendar a la futura mamá que se realice una prueba más exhaustiva para descartar posibles malformaciones o alteraciones cromosómicas del feto, como el Síndrome de Down. Estas pruebas pueden ser menos invasivas, como el cribado prenatal, o bien más invasivas, como la conocida amniocentesis.

Test de O'Sullivan y curva de glucosa

El test de O'Sullivan nos ayuda a controlar la presencia de diabetes gestacional, es decir, diabetes que solo se da durante el embarazo. Es fundamental para evitar trastornos en el feto y en la futura mamá.

• El test de O'Sullivan se realiza a todas las embarazadas. El test consiste en medir el nivel de glucosa en sangre. Hay que tomar una solución de 50 gramos de glucosa, disueltos en 200 cl de agua y, una hora después, hacer otra medición de glucosa en sangre, para comprobar si la insulina trabaja correctamente.
• Si el test de O'Sullivan da un nivel de azúcar elevado (superior a 140 mg/dl), se realiza una segunda curva de glucemia, la llamada "curva larga", que detecta o descarta definitivamente la presencia de diabetes gestacional.
• La curva de glucosa es un test que sirve para medir, con una primera extracción de sangre, los valores de glucemia en ayunas. Después, la mujer bebe una solución glucosada compuesta de agua y de 75-100 gramos de azúcar, y se repite el examen cada media hora durante tres horas.
• Basándose en los resultados obtenidos, se puede tener un diagnóstico de normalidad, tendencia a desarrollar diabetes o presencia de diabetes.

Test del estreptococo

• El test del estreptococo consiste en la realización de un frotis vaginal y rectal a la futura mamá, destinado a detectar la bacteria llamada estreptococo betahemolítico de grupo B, que puede anidar en la vagina y el recto sin provocar síntomas aparentes.
• Sin embargo, esta bacteria resulta peligrosa para el recién nacido que, al pasar a través del canal del parto, podría contraer una infección grave, como ya hemos visto en el punto anterior.
• Este importante examen del embarazo se realiza, aproximadamente, a las 35 semanas de gestación.

Monitorización del feto

La cardiotocografía, también conocida como monitorización fetal del corazón del futuro bebé, es un test no invasivo útil en la evaluación del estado de salud del bebé durante las últimas semanas de embarazo.

La cardiotocografía se puede realizar desde la semana 30 de embarazo, pero por lo general se recomienda empezar en la 37 de embarazo. A menos que se especifique lo contrario, el examen se repite una vez a la semana hasta el comienzo del parto.

(Te interesa: 10 preguntas sobre el líquido amniótico)

Control periódico del aumento de peso y la alimentación 

A lo largo del embarazo, concretamente, durante las visitas de control que la mujer embarazada realiza con su ginecóloga(o) cada mes, la profesional controlará el aumento de peso de la futura mamá, además de comprobar el latido fetal, la colocación, la altura del útero, y otra serie de comprobaciones que están incluidas en el protocolo del embarazo sano.

También comentará a la mamá los resultados de los análisis de sangre y orina y le orientará sobre los cambios que debe realizar en su alimentación, o bien la suplementación a la que debe recurrir, si procede.

(Te interesa: Ácido fólico en el embarazo)

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Alimentación de las embarazadas 

Una alimentación saludable durante el embarazo resulta fundamental para el bebé y la mujer embarazada. La alimentación tiene un papel fundamental en el embarazo. Por un lado, las mujeres embarazadas deben tomar ciertas precauciones en la mesa para evitar enfermedades, como la toxoplasmosis. Por otro lado, el embarazo también puede servir para mejorar los hábitos saludables en la mesa.

• En primer lugar, hay que tener presente la pirámide alimentaria, con las recomendaciones de los expertos. La futura mamá debe comer de forma más saludable y equilibrada, eligiendo adecuadamente los alimentos en el momento de la compra.
• También hay que tener presente que durante el embarazo no se debe aumentar exageradamente de peso, sino de forma controlada y pautada. Por lo tanto, no hay ninguna necesidad de comer el doble de lo habitual.
• Las vitaminas y los minerales son especialmente valiosos para el cuerpo de las embarazadas. Así es que prevalece la calidad de los alimentos por encima de la cantidad. El médico será el encargado de orientarte en este sentido. 

¿Cómo tener sexo en el primer trimestre de embarazo?

Una de las preguntas que más se hacen las futuras mamás es si pueden tener relaciones sexuales en el primer trimestre de embarazo. Siempre que la ginecóloga o el ginecólogo no indiquen lo contrario… ¡Por supuesto que sí!

Hoy en día, conocemos la influencia positiva que la sexualidad ejerce en las relaciones interpersonales, con un papel muy destacado en la salud y el bienestar de las personas en todas las etapas de su vida, incluida la maternidad.

¡AQUÍ TODA LA INFORMACIÓN SOBRE LAS RELACIONES SEXUALES DURANTE EL EMBARAZO!

Cuidados y bienestar durante el embarazo: los consejos prácticos

Ahora, te damos muchos consejos para que vivas tu embarazo de manera consciente, rica, plena y llena de bienestar físico y emocional. ¡Cuídate como nunca!

• Como ya hemos dicho anteriormente, aliméntate de forma sana, variada y equilibrada, siguiendo todos los consejos que te ha dado tu ginecólogo.
• Duerme bien, descansa todo lo que puedas y haz caso a tu cuerpo. En las diferentes etapas del embarazo, sobre todo al inicio y en la recta final, necesitarás más descanso. ¡Tu cuerpo es sabio; no le lleves la contraria!
• Realiza actividad física diaria adecuada a tu estado: natación, caminar, yoga, pilates, gimnasia suave... Encuentra tu actividad favorita y no dejes de moverte. ¡Te beneficiará muchísimo!
• Mímate y dedícate tiempo para hacer las cosas que más te gustan. Si no puedes prescindir de trabajar, aprovecha los momentos de descanso para dedicarte a ti misma. Leer, bailar suave, salir a tomar algo, dar un paseo por la playa o el parque, ir al cine, disfrutar con las amigas... ¡Cualquier cosa que te haga sentir realmente bien y relajada!
• Invierte en tu bienestar emocional, en tu respiración, en tus ganas de conectar con el bebé que está creciendo en tu vientre. ¡Ese será uno de los mayores regalos que le puedas hacer mientras se está gestando!

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