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Alimentación de tu bebé de 4 meses
A veces, en esta etapa, aparece la crisis de lactancia, que no se debe a un aumento o disminución en la producción de la leche, sino a un cambio en las fases de sueño del bebé: aumentan sus despertares nocturnos, lo que hace pensar a la mamá que se está quedando con hambre.
Alimentación de tu bebé de 4 meses
Lactancia. La mayoría de los bebés padecen molestias o trastornos digestivos (gases, reflujo, estreñimiento) durante su primer año de vida. Si tu hijo los presenta, acude al pediatra para que diagnostique al niño y te diga qué hacer.
Lactancia mixta y fórmula. No basta simplemente con lavar, es preciso esterilizar los biberones y los chupones, puesto que las defensas inmunitarias del bebé todavía no están totalmente desarrolladas y podría contraer infecciones intestinales como vómitos, diarrea y fiebre.
Lactancia materna a los 4 meses
La mayoría de los lactantes presentan trastornos digestivos leves en sus primeros meses de vida debido a la inmadurez de su sistema digestivo. Estos son los más comunes:
• Cólicos. Aparecen en la segunda o tercera semana de vida y persisten hasta el tercer o cuarto mes. Dolor abdominal, llanto ininterrumpido y desesperado, movimientos de piernas, ruidos intestinales e irritabilidad, son los principales síntomas.
• Estreñimiento. El cambio de la leche materna a fórmula, puede ser la causa principal, considerado como tal cuando las heces son poco frecuentes y duras. Se debe consultar al pediatra, aunque probablemente sólo sea necesario cambiar la dieta del bebé o ayudarlo con algunos ejercicios.
• Regurgitación. Sucede cuando la leche se mezcla con los ácidos estomacales, pero regresa a la boca debido a la inmadurez del esfínter que cierra la entrada del estómago, provocando que el bebé expulse una pequeña cantidad de leche.
• Diarrea. Las causas pueden ser muy variadas: mala absorción de azúcares, una enfermedad celíaca o alergia a la leche. Es necesario cuidar que no haya deshidratación y reponer los líquidos perdidos.
Lactancia mixta o fórmula a los 4 meses
Esterilizar los biberones y chupones del bebé es básico para evitar que adquiera alguna enfermedad. Estos son los métodos de esterilización:
Ebullición. Coloca en una olla o en un esterilizador los biberones a desinfectar y llena el recipiente de agua hasta sumergirlos por completo. Deja hervir el agua durante 15-20 minutos. Mantén los biberones en la olla con la tapa puesta hasta el momento de su utilización.
A vapor. Necesitas un hervidor eléctrico que transforme el agua en vapor. Ahora, coloca los biberones dentro y vierte el agua en el recipiente. Cierra la tapa herméticamente y pon a trabajar el aparato. Pasados 15 minutos, la salida del vapor te indicará que las impurezas y bacterias fueron eliminadas.
En frío. Introduce los biberones en un recipiente y llénalo de agua. Después, añade la sustancia desinfectante aconsejada por el fabricante. Sumerge los objetos completamente, procurando que salga todo el aire y deja actuar la sustancia durante 30-90 minutos.
En microondas. Únicamente hay que adquirir un recipiente especial provisto de tapa y que sea resistente al calor, en él coloca los biberones y las tetinas con un poco de agua e introdúcelo durante unos 4-8 minutos. La esterilización realizada de esta manera dura 3 horas.