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Alimentación de tu bebé de 1 mes
Cuando le das el pecho, se estimulan todos sus sentidos (la vista, el gusto, el tacto, el olfato y el oído). Instintivamente se voltea hacia a ti, cuando lo acercas para que coma; al rozar su mejilla con uno de tus dedos, abre la boca. Se tranquiliza al escuchar melodías suaves, o bien, sonidos que le recuerden aquellos del vientre materno. También percibe los olores, pero en especial el tuyo y el de tu cuerpo.
Alimentación de tu bebé de 1 mes
Lactancia. La leche materna ofrece la combinación perfecta de nutrimentos para el bebé, incluyendo las vitaminas, proteínas y grasas que necesita.
Lactancia mixta y fórmula. No todo el tiempo las mamás se encuentran junto a sus hijos, así que aquí es donde hace su aparición la lactancia mixta, ya sea para extraer la leche materna y dársela en biberón u ofrecerle fórmula.
Lactancia mixta o fórmula al primer mes
Si por cualquier motivo tienes que recurrir a la fórmula es muy importante que no te dejes llevar por el desconsuelo o los sentimientos de culpa de no poder lactar a tu pequeño. Hoy en día, las leches de fórmula que se comercializan son excelentes y satisfacen plenamente las exigencias nutricionales del niño.
Alimentarlo con biberón te permitirá gozar igualmente de un momento maravilloso e íntimo con tu bebé, así que:
• Esteriliza el biberón y la tetina con cuidado y prepara su leche respetando las proporciones que te ha indicado el pediatra.
• Debes saber que el bebé alimentado con fórmula come más rápido, pero necesita el mismo contacto con su madre, por lo que debes tenerlo en brazos durante unos minutos después de finalizar la toma.
Lactancia materna al primer mes
Tu hijo acaba de llegar al mundo. Notarás que duerme la mayor parte del día, entre 14 y 17 horas, y se despierta cada 2 o 3 horas para comer. Si no lo hace, no dejes pasar más tiempo, cárgalo y, destápalo un poco para que le des pecho.
Te sorprenderá saber que, desde que nace, reacciona al escuchar tu voz. Si tu cara se encuentra a unos 10 centímetros de distancia de la suya te podrá ver y al crecer, el rango de su visión se ampliará. Cuando le das pecho se estimulan todos sus sentidos e instintivamente se voltea hacia a ti cuando lo acercas para que coma; al rozar su mejilla con uno de tus dedos, abre la boca. Se tranquiliza al escuchar melodías suaves, o bien, sonidos que le recuerden aquellos del vientre materno.