Después de que nace un bebé, una mujer necesita tener algunos cuidados para evitar complicaciones que pongan en peligro su salud. Pero eso no significa que deba permanecer en cama todo el día o que no se pueda bañar.
La recuperación de una mujer después de parir es progresiva. Es normal que comience a tener cambios físicos y emocionales. A este proceso se le conoce como puerperio (o cuarentena) y comprende desde el parto (vaginal o cesárea) hasta las seis u ocho semanas posteriores al alumbramiento, es decir entre 35 y 40 días, de ahí el término cuarentena, de acuerdo con la ginecóloga y obstetra Judit Jaramago.
Elimina esas ideas falsas
A continuación, te mencionamos algunos de los mitos más populares sobre la cuarentena que proliferan en nuestra sociedad, pero que no tienen ninguna base científica.
¡No te bañes!
Esta es una de las ideas más comunes y erróneas que hay sobre la cuarentena. Sin embargo, después de parir, una mujer va a tener una secreción vaginal que irá disminuyendo al paso de los días. Se trata de los loquios, un flujo que contiene sangre, moco y tejido placentario ¡Es normal! Entonces, te imaginas lo incómodo que puede resultar no bañarte. No hay ninguna contraindicación para hacerlo. Así que no temas darte un baño con agua caliente y ¡relajarte!
Cúbrete de pies a cabeza
Otra idea falsa es creer que una mujer que acaba de ser madre tiene que cubrirse de pies a cabeza para que no se le vaya la leche. Imagínate estar a 30 grados centígrados y tener que ponerte calcetas, suéter y gorro ¡Qué miedo! Eso puede provocar que sudes mucho y por consiguiente te deshidrates. Para tener una buena producción de leche materna es necesario tomar suficiente agua, alimentarte bien y dar seno materno a libre demanda.
No es necesario ponerte una faja posparto, a menos de que hayas tenido cesárea. En ese caso, se recomienda usarla hasta que te hayan quitado los puntos, y solamente por unos días. Después del parto, ya sea cesárea o parto natural, el útero tardará entre 5 y 6 semanas para regresar a su tamaño normal, uses o no uses faja. Debido a ello vas a experimentar lo que popularmente se conoce como entuertos, que son unos espasmos abdominales o contracciones uterinas que tienen como finalidad hacer que el útero regrese poco a poco al tamaño que tenía antes del embarazo.
De acuerdo con la asociación civil Infogen, los entuertos son buenos y deseables, porque si la matriz no se contrae los vasos sanguíneos quedan abiertos y podría presentarse una hemorragia que pondría en riesgo la vida de la madre.
Bebe muchos atoles y toma cerveza
Otro de los mitos más arraigados es el de creer que bebiendo atoles y champurrados, así como tomando cerveza, la producción de leche será abundante. Sin embargo, lo único que está comprobado que aumenta la producción de leche es dar de amamantar al bebé cuando desee y tener una alimentación equilibrada, además de tomar suficiente agua. Por otra parte, es importante que estés informada y sepas que alcohol se excreta en la leche materna.
Seguramente has escuchado a muchas personas decirte que después del parto aproveches la cuarentena para descansar todo lo que puedas en lo que tu cuerpo se recupera ¡No es para tanto! Seguramente piensas que unas vacaciones no estarían nada mal, pero la verdad es que cuidar a un recién nacido requiere mucha energía de nuestra parte y es imposible descansar. Sobre todo, porque un recién nacido apenas se está adaptando y todavía no duerme toda la noche.
No hagas ejercicio
De acuerdo con la ginecóloga Judit Jaramago, el ejercicio físico posparto se puede reanudar de forma paulatina y en función de cómo haya ido el parto (vaginal o cesárea), los puntos que tenga una mujer, etcétera. “Si escuchas a tu propio cuerpo irás notando qué puedes hacer y hasta dónde puedes llegar”.
Hay algunas actividades posparto que se recomiendan realizar, como la caminata o los ejercicios de Kegel, para tonificar los músculos del suelo pélvico. Estos ejercicios también ayudan en caso de que tuvieras incontinencia urinaria.
¿Cómo hacer los ejercicios de Kegel? Mayo Clinic, recomienda:
Imaginar que estás sentada sobre una canica
Contraer los músculos pélvicos como si estuvieras levantando la canica.
Realizar esto durante tres segundos a la vez.
Descansar a la cuenta de tres.
Intentar hacer el ejercicio de 10 a 15 veces seguidas, al menos 3 veces al día.
Abstinencia sexual
Después de parir es normal que una mujer vea reducido su libido y que no tenga deseo sexual. Esto se puede deber a diversos factores como el sagrado vaginal, los dolores abdominales, el aumento de la prolactina y la reducción de los estrógenos. Por lo general, la mujer verá que poco a poco vuelve a la normalidad entre los 35 y 40 días después del parto.
Los especialistas apuntan que tener o no relaciones sexuales va a depender de cada mujer. No hay un tiempo estipulado que marque el reinicio de la vida sexual después del parto. No obstante, la ginecóloga Camargo recomienda que se inicien hasta que hayan cesado las pérdidas sanguíneas para evitar infecciones. Asimismo, aconseja evitar jacuzzis o piscinas “debido a que el cuello de la matriz aún estará abierto y podrían entrar gérmenes y con ellos una posible infección”.
