¿Se pueden comer camarones en el embarazo?

Una de las preguntas más frecuentes entre las embarazadas es si pueden o no consumir camarones en el embarazo. De hecho, los camarones son un alimento muy rico en proteínas y en minerales, como el yodo, importantes para nuestro organismo. También tienen un gran contenido en vitaminas, como la B3, B12, D, E y K, que también desempeñan un importante papel, sobre todo, porque son muy beneficiosas para el cabello y las uñas. 

(Te interesa: La importancia de la vitamina D en el embarazo y en el bebé)

Sin embargo, no tenemos muy buenas noticias para todas aquellas embarazadas a las que les encanten los camarones. Y es que los organismos sanitarios recomiendan reducir o evitar el consumo de camarones y del resto de mariscos durante el embarazo. ¿Por qué?

Principalmente, porque comer camarones en el embarazo puede implicar algunos riesgos para la salud de la futura mamá y del feto. Veamos cuáles son:

• Por el peligro de contraer salmonelosis. Se trata de una infección que la futura mamá y el resto de la población podemos contraer al comer marisco crudo en el embarazo, en el caso de que éste estuviera contaminado por una bacteria llamada salmonela. Los principales síntomas de esta infección son diarrea, fiebre y calambres en el abdomen, que suelen durar hasta tres días. El peligro es que la diarrea provocada por la salmonelosis podría provocar deshidratación, lo cual sí representa un peligro si se está embarazada.
• Por el riesgo de intoxicación con anisakis. El anisakis es un gusano que habita en el sistema digestivo de los peces y mamíferos, si están contaminados por el mismo. El anisakis provoca intoxicaciones alimentarias y sus principales síntomas son náuseas y vómitos, erupción cutánea, dolor abdominal intenso y fiebre.
• Otro riesgo es la toxoplasmosis. Es una enfermedad causada por un parásito, el toxoplasma Gondii, que, si se contrae en el embarazo, puede tener graves consecuencias, como abortos o malformaciones congénitas que pueden afectar al cerebro, los ojos y otros órganos del feto. En este caso, los síntomas de la toxoplasmosis no son tan evidentes y son similares a los de una gripa o un resfriado.

Por tanto, para evitar contraer este tipo de enfermedades que podrían afectar a la salud de la embarazada y del futuro bebé, los expertos recomiendan reducir o evitar este tipo de alimento en el embarazo. Pero, ¿hay alguna forma en la que podamos disfrutar de este alimento durante el embarazo?

(Te interesa: ¿Se puede comer atún en el embarazo?)

¿Qué camarones se pueden comer en el embarazo? 

Como ya hemos dicho, el consumo de camarones y de otros mariscos crudos está prohibido en el embarazo, ni tan siquiera en forma sushi o de carpaccio. Sin embargo, si decidimos comer camarones en algún momento del embarazo:

• Hay que optar por los camarones que se hayan cocido previamente. Y es que, durante el embarazo, es fundamental que cocinemos los camarones a altas temperaturas y de una forma cuidadosa, para matar los posibles microorganismos patógenos que puedan habitar en ellos.
• Otro consejo a tener en cuenta es que, al igual que ocurre con el pescado blanco y con el pescado azul, sobre todo para evitar el riesgo de contraer anisakis, es congelar siempre los camarones previamente a ser cocinados, durante un mínimo de tres días.
• También hay que tener en cuenta no chupar la cabeza de los camarones y de los langostinos, aunque estén cocinados, porque pueden contener metales peligrosos, como el cadmio.

En resumen, durante el embarazo, no hay que abusar del consumo de camarones ni de otros mariscos. Nunca hay que comerlos crudos. Y, si se toman de forma ocasional, es fundamental que estén bien cocidos.

(Te interesa: ¿Se puede comer queso en el embarazo?)