¿Conoces los miedos sexuales más comunes en las mujeres?

La sexualidad debería vivirse como algo natural sin ningún tipo de tabú. Sin embargo, al tratarse de un momento de extrema vulnerabilidad, porque nos encontramos desnudos frente a otra persona, se pueden despertar los miedos más profundos y generar mucha ansiedad, ya sea en hombres o mujeres.

Según los expertos, la diferencia es que a los hombres les cuesta mucho más admitir los miedos e intentar pedir ayuda. En cuanto a las mujeres, suelen compartir sin pudor con sus mejores amigas algún episodio que no va bien en la cama, lo que hace que resulte más fácil sobrellevarlo sin dramatizar.

Ante el primer síntoma de ansiedad o temor, es importante consultar con un especialista, porque con el tiempo puede convertirse en una fobia que impida tener una vida sexual normal. Aunque la comunicación con la pareja es fundamental, muchas veces, un especialista te puede ayudar. Recuerda que le pasa a muchas mujeres.

Los temores sexuales más comunes en las mujeres

Aceptación del cuerpo

Muchas mujeres no aceptan su cuerpo: se ven gordas en lencería erótica, no se sienten sexys o no se sienten cómodas con algunos detalles de su cuerpo.

Les preocupa si tienen celulitis, la panza, o las estrías. Recordemos que el marketing influye en la forma de percibirnos como personas más o menos deseables, y muchas veces se despierta el miedo a no gustar físicamente al otro. Algunas, incluso, prefieren tener sexo en la oscuridad.

Recordemos que el atractivo erótico no está determinado por nuestro cuerpo, sino por la actitud, y también por lo que hacemos y expresamos con él.

Tal vez no sepa complacer a mi pareja

Es una preocupación que refleja inseguridad y ansiedad por rendimiento. Es algo que no preocupa solo a los hombres, sino también a las mujeres.

Muchas mujeres temen no complacer a las parejas. En muchos casos, este miedo a decepcionar sexualmente al otro puede convertirse en una condición debilitante. En este caso, buscar ayuda de un experto es importante, como un asesor psicológico o un terapeuta que tenga experiencia en el tratamiento de problemas sexuales.

El experto puede ayudar a enseñar a la persona a tomar conciencia de la importancia de su propio placer y a saber comunicarse mejor con la pareja. Además, puede ofrecer herramientas para mejorar la autoestima y aprender a vivir sin miedos ni inseguridades, lo que llevará a mejorar la calidad de la vida sexual.

Ruptura del preservativo

Es uno de los miedos más arraigados en las mujeres, ya que existe la posibilidad de que el preservativo se rompa en un momento dado, y eso puede generar un embarazo no deseado, o mucho peor aún, una infección de transmisión sexual.

El preservativo es 95% seguro, pero siempre hay que verificar la fecha de caducidad. Es importante usarlos correctamente y con lubricantes a base de agua.

Temor a la penetración

Muchas mujeres sienten que la penetración es un acto agresivo y no les resulta atractivo en las prácticas sexuales. Esto puede ocurrir porque pueden sentir dolor en la penetración, por haber sido víctimas de un abuso sexual o temer un embarazo no deseado.

La solución puede pasar por el uso de lubricantes para evitar el dolor en la penetración, y también por darse la oportunidad de tener sexo llegando al orgasmo de otras maneras.

Los olores

El problema del olor es un tema muy preocupante y uno de los grandes temores, ya sea de los genitales, los pies, el sudor o el aliento. Por eso, muchas mujeres tiene la obsesión de utilizar productos de higiene, como cremas, perfumes, desodorantes, etc.

Una higiene adecuada es una prioridad para una buena salud, pero recordemos que el cuerpo tiene sus propios olores y muchos favorecen la química sexual.

No tener un orgasmo

Es sabido que muchas mujeres no pueden llegar al orgasmo solo con el coito, lo que significa que es importante que aquellas interesadas en llegar al clímax experimenten con diferentes métodos.

Es uno de los principales miedos de las mujeres que piensan que esta situación genera malestar en el hombre.

El aspecto de la vulva

Muchas mujeres se preocupan por este tema, puesto que es una inseguridad muy frecuente en el momento de tener sexo.

Existen múltiples tipos de vulvas; no existe la perfección. Por lo tanto, no debería ser un tema de preocupación. Muchas veces, la pornografía muestra cómo debería lucir una vulva, pero es momento de dejar de comparar y empezar a disfrutar, ya que no existen modelos estándar.

Palabras finales

No importa cuáles sean tus preocupaciones; es perfectamente normal tener miedos relacionados con el sexo. Pero, al final, lo mejor que puedes hacer es hablar sobre ellos, con alguna amiga, con tu pareja o con tu compañero sexual abiertamente.

Si piensas que los miedos sexuales son demasiado fuertes y que te cuesta superarlos, es un buen momento para buscar la ayuda de un especialista.