10 posturas sexuales sin penetración: ¿te las imaginas?
10 posturas sexuales sin penetración: ¿te las imaginas?
30 Aug 2023
Las relaciones sexuales no siempre tienen por qué incluir la penetración. Existen muchas, y muy diversas maneras, de alcanzar el clímax sexual y disfrutar del sexo sin recurrir necesariamente al coito. En este artículo, te contamos con detalle cómo puedes vivir momentos muy placenteros sin penetración. ¡10 posturas excitantes!
Sí, se pueden tener orgasmos sin penetración, suelen ser muy placenteros y, muchas veces, más intensos, debido al deseo que provoca la ansiedad, y porque el momento de estimulación es lento y más duradero.
Cuando pensamos en sexo, generalmente, imaginamos que concluye con la penetración, pero esta no es la única manera de lograr placer en un acto sexual.
Hay que tener en cuenta que solo el 18% de las mujeres pueden llegar a un orgasmo con la penetración a través de la estimulación vaginal, el resto necesita una estimulación directa en el clítoris para alcanzarla. Este tipo de orgasmo se puede obtener de muchas otras maneras, además de la penetración.
Resulta muy enriquecedor conocer varias posturas sexuales sin penetración, ya que son muy beneficiosas para para conectar físicamente, y potencialmente llevar a alguien al orgasmo.
Además, es indispensable saber cómo explorar el propio cuerpo y el de la otra persona, así como centrarse más en el contacto por medio de roces, caricias y movimientos de la lengua. Puede ser la práctica ideal para dar y recibir placer al máximo.
Por lo tanto, para salir de la rutina y explorar un placer más intenso, puedes intentar practicar posiciones sexuales sin penetración.
Posturas sexuales sin penetración: ¡las más excitantes!
Seguidamente, vamos a describir las posturas sexuales que no incluyen la penetración, pero que son absolutamente excitantes para ambos miembros de la pareja. ¡Conócelas!
1. El 69
¡Todo un clásico! Para algunas parejas, puede resultar incómodo acostarse uno encima del otro, de manera que una buena opción es hacerlo de lado, en alguna posición en la que los dos se sientan cómodos. Esto permite gastar menos energía y dedicarse a explorar los puntos de placer del otro.
Otra idea es turnarse, para hacer todo lo posible por hacer sentir placer al otro con caricias, estimulación con los dedos y con la lengua. Es preciso encontrar el ritmo y la técnica que funciona para cada uno.
2. El espejo
La masturbación mutua puede ser muy excitante si estás buscando explorar tu lado voyeurista(y exhibicionista). Esta posición podría convertirse en su favorita.
Los dos miembros de la pareja se sientan uno frente al otro y se masturban mientras se miran. Aquí ambos pueden mirarse a los ojos mientras lo hacen, lo que va aumentando e intensificando el placer al llegar al clímax.
Se puede practicar en la posición del misionero clásica, en la ambos miembros de la pareja están cerca y besándose, tocándose y frotándose los cuerpos, pero vestidos o solamente con ropa interior.
Consiste en realizar los movimientos típicos, pero combinando la posición de las piernas solamente con fricción sobre los genitales, sin penetración. No hay mejor manera de generar deseo incontrolable.
4. De pie en la ducha
Prueba esta posición en la ducha o en cualquier lugar. Uno de los dos se baña con la ducha en la espalda mientras el otro se agacha y le practica sexo oral, o bien lo estimula manualmente.
También es placentero enjabonarse, pasar la esponja por el cuerpo del otro con masajes muy sensuales y besos. Si el hombre tiene una erección, puede friccionar el pene contra la mujer, ella puede frotar su clítoris, pero sin penetración.
5. La silla
En esta posición, la mujer puede sentarse fácilmente sobre su pareja y ajustarse hasta encontrar la estimulación del clítoris. El compañero, que está sentado, puede friccionar el pene contra la vulva, o puedes apretar tus piernas masajeando, o ayudar con tus manos hasta que llegue al orgasmo.
6. Estimulación de los pezones
Muchas personas pueden llegar al orgasmo a través de la estimulación de los pezones. La pareja puede realizar esta práctica estimulando los pezones y los pechos del otro con la boca, con las manos, aplicando aceite de masaje, rozando los pezones con plumas, guantes, telas de seda o toallas, según el gusto de cada uno. Es otra manera de llegar al orgasmo sin penetración.
7. Kunyaza
Es una práctica sexual tradicional que se realiza principalmente en África Central, cuyo objetivo es facilitar el orgasmo femenino de calidad.
Consiste en estimular a la mujer acariciando sus labios vaginales y el clítoris con el pene erecto. El hombre puede frotar con el pene la parte superior de la vulva de izquierda a derecha. en zigzag, pero sin penetración.
8. Petting
Consiste en acariciarse, abrazarse, besarse... Se pueden realizar caricias íntimas por debajo de la ropa, pero siempre con la ropa puesta.
Se puede practicar sexo oral o turnarse para masturbar al otro. Contribuye a que desaparezca la ansiedad en situaciones en las que a la mujer le cuesta llegar al orgasmo.
9. Masajes excitantes
El masaje puede ser una excelente manera de tener intimidad con la pareja sin que los genitales lleguen ni siquiera a tocarse.
Hay que concentrarse en masajear la parte superior del cuerpo de la pareja, la espalda y los hombros, y hacer que se sienta relajada. El contacto piel con piel ayuda a liberar oxitocina, la misma sustancia que se libera durante las relaciones sexuales.
Añadir un aceite aromático de masaje, a ser posible templado, incrementará la sensación de placer y bienestar.
10. El "perrito"
Se trata de la típica posición del "perrito", pero sin penetración. Al hacerlo de esa manera, se juega un poco con el cerebro, porque es una posición tradicional para la penetración. Las manos se utilizan para incrementar la estimulación.
Puedes acariciar el cuerpo de tu pareja o bien utilizar un juguete, como un succionador de clítoris, pero sin penetración. La excitación será notable y se podrán obtener diferentes sensaciones, más intensas.
Para terminar...
Probar el sexo sin penetración o combinar ambos métodos es una muy buena idea para variar, salir de la rutina y sentir otro tipo de placer al que estamos acostumbrados.
Además, se genera una gran tensión el tocarse y estimularse sin penetración. Se pueden descubrir sensaciones completamente nuevas y zonas erógenas que nunca antes se habían conocido. En definitiva, el sexo sin penetración contribuye a ser más juguetones, creativos e imaginativos, y realmente es una gran manera de renovar la vida sexual.
No hay que olvidar que el placer no se trata solo de la penetración, sino de generar y sentir placer a través de todo el cuerpo.
