Te puede interesar…
- Mi bebé y yo
- Bebés
- Salud y bienestar del bebé
- Cuidados del bebé
- Cómo limpiar las partes íntimas del bebé
Cómo limpiar las partes íntimas del bebé
Sobre todo al principio, pueden surgir algunas dudas sobre cómo hacerlo y qué productos usar para limpiar los genitales de los más pequeños. ¡Aquí tienes algunas importantes sugerencias!
- ¿Por qué los genitales del recién nacido están hinchados y enrojecidos?
- ¿Y si los testículos no han bajado?
- ¿Por qué algunas niñas tienen pérdidas de sangre?
- ¿Por qué, en algunas niñas, los labios mayores están parcialmente “pegados” entre ellos?
- ¿Hay que limpiar los genitales a cada cambio de pañal?
- ¿Qué hacer si la zona genital está enrojecida?
- ¿Niños y niñas se limpian de la misma forma?
- ¿Hay que bajar la piel del pene?
- ¿Hay que eliminar la sustancia blanca que queda entre los labios menores?
¿Por qué los genitales del recién nacido están hinchados y enrojecidos?
Al nacer, los genitales son un poco más grandes en comparación con el resto del cuerpo. En las niñas, los labios mayores son bastante voluminosos; en los niños, los testículos son muy evidentes. Esto se debe a las hormonas que la mamá ha trasmitido al bebé durante el embarazo. Por eso, a veces, también las mamas pueden aparecer engrosadas en ambos sexos.
En los niños, además, puede presentarse un fenómeno llamado hidrocele, es decir, una acumulación de líquido en el escroto (la bolsita que contiene los testículos): esto ocurre porque el pequeño conducto por el que, durante la vida intrauterina, los testículos pasan del abdomen al escroto, todavía no se ha cerrado (generalmente, se cierra después de nacer, pero a veces ocurre un poco más tarde).
Por su parte, el enrojecimiento de la vulva y del escroto se debe a la notable afluencia de sangre a la zona genital. En poco tiempo, cuando el organismo del bebé se asiente, la hinchazón y el enrojecimiento desaparecerán solos.
¿Y si los testículos no han bajado?
En los niños, los testículos se forman en el abdomen y bajan al escroto poco antes de nacer. Sin embargo, es muy frecuente que uno o ambos testículos todavía no hayan bajado por completo en el momento del nacimiento, o que suban y bajen. En la mayoría de los casos, los testículos llegan a su posición normal de forma espontánea, durante las primeras semanas de vida.
¿Por qué algunas niñas tienen pérdidas de sangre?
Este sangrado se llama “pseudo-menstruación neonatal” y es muy frecuente en los primeros días de vida. Se debe a la bajada repentina de los estrógenos que pasaban del organismo de la madre al de la niña durante el embarazo. Normalmente, dura un par de días y después desaparece por sí solo.
¿Por qué, en algunas niñas, los labios mayores están parcialmente “pegados” entre ellos?
Es un fenómeno bastante habitual, aunque esto no impide la salida de la orina. También este fenómeno se debe a las hormonas. El tratamiento es muy sencillo: con toda seguridad, el pediatra te aconsejará el uso de una crema específica en la zona afectada que ayudará a que las partes adheridas se despeguen por completo.
¿Hay que limpiar los genitales a cada cambio de pañal?
El cambio de pañal de un recién nacido se hace unas 6 veces al día. Si sólo hay pipí, basta con enjuagar la zona con un poco de agua. Si el bebé está sucio de popó, hay que lavarle con un jabón específico para bebés y en pequeñas cantidades. Durante las maniobras de limpieza, no hay que olvidarse de los pliegues de los muslos, donde se acumulan fácilmente residuos de pipí.
¿Qué hacer si la zona genital está enrojecida?
A veces, los residuos de pipí pueden provocar un enrojecimiento de la piel. En este caso, es necesario utilizar un producto específico para la zona del pañal del bebé. Asimismo, cuando lavemos al bebé, hay que secarlo con atención (¡también entre los pliegues!) sin frotar la piel.
¿Niños y niñas se limpian de la misma forma?
Una buena higiene de los genitales es importante para ambos sexos. Sin embargo, en las niñas, debido a la cercanía entre la uretra, el ano y la vagina, hay que tener un cuidado aún mayor. Es fundamental lavar la zona con movimientos siempre de adelante hacia atrás y nunca al revés, para evitar el paso de las bacterias del ano hacia la vagina. Por el mismo motivo, si se usa una esponja, hay que tener cuidado y no pasarla por los genitales sin antes haberla enjuagado con agua limpia.
¿Hay que bajar la piel del pene?
Sobre este tema hay una verdadera discrepancia. Algunos pediatras afirman que la piel del prepucio tiene la función de proteger el pene del riesgo de infecciones y que no debe bajarse. Otros dicen que es mejor bajarla un poco para limpiar mejor la zona. Durante el baño, con la ayuda de una solución jabonosa, se puede intentar desplazar un poco la piel, pero sin forzar la maniobra, pues podría producirse el riesgo de causar pequeños traumas y heridas que, al cicatrizarse, podrían hacer que la piel se vuelva más rígida.
¿Hay que eliminar la sustancia blanca que queda entre los labios menores?
No se trata de suciedad: esa sustancia blanca que las niñas tienen en los genitales en los primeros días de vida es un residuo de vérnix caseoso. La mamá debe abrir un poco los labios mayores para una mejor higiene, pero sin limpiar el vérnix, que absorberá el cuerpo de forma espontánea en pocos días.