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La audición es fundamental en los primeros años de vida. Cuando un niño no escucha bien, su desarrollo del habla y aprendizaje se puede ver afectado de forma permanente si no se detecta y atiende a tiempo. Aquí te explicamos las principales causas y cómo puedes prevenirlas.
Las causas genéticas son responsables de dos terceras partes de los casos de pérdida auditiva congénita. Estas pueden heredarse de forma recesiva (ambos padres portan el gen afectado) o dominante (se manifiesta en cada generación). A veces no hay antecedentes familiares, lo que puede sorprender a los padres.
Además de los factores genéticos, existen causas no hereditarias:
Estos factores pueden dañar el oído del bebé incluso antes de nacer.
Cuando un niño nace con audición normal pero la pierde después, se considera una causa adquirida. Muchas de estas pueden prevenirse o tratarse si se detectan temprano.
La otitis media es una infección del oído medio que suele originarse en la nariz o garganta y migrar al oído. Es muy común en niños pequeños, y si se vuelve crónica o no se trata bien, puede causar pérdida de audición.
Se contrae en albercas o playas y también puede deberse a hongos o al mal uso de hisopos de algodón. Generalmente no causa daño auditivo permanente, salvo que haya complicaciones graves.
La laberintitis viral y otras infecciones del oído interno pueden causar daño permanente si no se atienden de inmediato. Una de las más peligrosas es la sordera secundaria a meningitis, que puede ocurrir a cualquier edad.
Algunos bebés enfrentan condiciones al nacer que pueden provocar pérdida auditiva:
Estas condiciones, sobre todo en bebés prematuros, suelen combinarse y aumentar el riesgo.
Ante cualquier señal de que tu hijo no responde a los sonidos, no balbucea como otros niños de su edad o tiene antecedentes de infecciones frecuentes, es fundamental acudir con un especialista en otorrinolaringología o audiología pediátrica.
La detección oportuna puede evitar daños permanentes en el lenguaje, el aprendizaje y la socialización.
La pérdida auditiva infantil tiene múltiples causas, muchas de ellas prevenibles. Con revisiones médicas periódicas, vacunación y vigilancia de signos de alerta, se puede detectar a tiempo. Cuidar la salud auditiva es cuidar el desarrollo integral de tu hijo.
DR. GONZALO CORVERA
Director del Instituto Mexicano de Otología y Neurotología S.C. (IMON)
www.imon.com.mx
Instagram.@imon_salud
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