Síntomas y tratamiento de la amigdalitis infantil

29 Aug 2025
niña con dolor de garganta

Si tu pequeño tiene infecciones de garganta frecuentes, ronca mucho o le cuesta tragar, podría tratarse de amigdalitis. Descubre cuándo es motivo de preocupación y cuándo es necesaria una operación.

¿Qué es la amigdalitis y por qué es común en la infancia?

La amigdalitis es la inflamación de las amígdalas, dos masas de tejido ubicadas en la parte posterior de la garganta que ayudan a combatir infecciones. Aunque cumplen una función protectora, también pueden infectarse, especialmente en la infancia.

En niños, es una de las causas más frecuentes de consulta pediátrica. Puede ser causada por virus (la más común) o por bacterias como el estreptococo beta-hemolítico del grupo A.

Síntomas comunes de la amigdalitis infantil

Identificar una amigdalitis puede ser sencillo si conoces sus principales manifestaciones:

  • Dolor de garganta intenso
  • Fiebre alta
  • Dificultad para tragar alimentos o saliva
  • Amígdalas rojas o con placas blancas
  • Voz gangosa o "ronca"
  • Mal aliento
  • Ganglios inflamados en el cuello

En algunos casos, también pueden presentarse dolores abdominales o erupciones en la piel, como en la fiebre escarlatina.

sintomas-tratamiento-amigdalitis-infantil-dolor-garganta

¿Cuándo es peligrosa la amigdalitis?

Aunque la mayoría de los casos se resuelven con tratamiento sintomático o antibióticos, ignorar una amigdalitis bacteriana puede derivar en complicaciones graves, como:

  • Abscesos periamigdalinos (acumulación de pus)
  • Fiebre reumática
  • Glomerulonefritis (daño renal por infección estreptocócica)

Si tu hijo presenta amigdalitis recurrentes, dificultad para respirar o tragar, o somnolencia excesiva durante el día, es importante consultar al pediatra.

Agrandamiento de amígdalas y adenoides: ¿cuándo intervenir?

Tanto las amígdalas como las adenoides pueden agrandarse debido a infecciones repetidas. En algunos casos, este agrandamiento es tal que afecta la calidad de vida del niño.

Signos que indican posible intervención quirúrgica:

  • Apnea del sueño (el niño deja de respirar unos segundos mientras duerme)
  • Ronquidos intensos y constantes
  • Dificultad crónica para tragar
  • Voz nasal o ronca persistente
  • Infecciones de garganta múltiples (más de 7 episodios al año, según la American Academy of Otolaryngology)

En estos casos, se puede recomendar una amigdalectomía (extirpación de amígdalas) o adenoidectomía (extracción de adenoides), o ambas.

La amigdalectomía: ¿En qué consiste y es segura?

La cirugía para extraer las amígdalas se realiza bajo anestesia general. Es un procedimiento común y seguro. La recuperación suele durar entre 7 y 14 días. Durante ese tiempo, se recomienda:

  • Dieta blanda y fría
  • Mucha hidratación
  • Medicación para el dolor
  • Descanso

Tras la operación, los niños suelen experimentar menos infecciones y dormir mejor si había apnea del sueño.

Prevención y cuidados para evitar la amigdalitis

No siempre se puede evitar, pero hay acciones que ayudan:

  • Enseñar a los niños a lavarse las manos frecuentemente
  • Evitar compartir vasos o utensilios
  • Consultar al pediatra ante dolores de garganta frecuentes
  • Seguir el tratamiento completo cuando se indiquen antibióticos

La amigdalitis en niños es muy común y, por lo general, no es grave. Sin embargo, cuando se vuelve frecuente, afecta la respiración o la alimentación, puede requerir una intervención médica o quirúrgica. Reconocer los síntomas y actuar a tiempo es clave para evitar complicaciones. Siempre consulta al pediatra ante cualquier duda o cambio en el estado de salud de tu hijo.

Preguntas frecuentes sobre amigdalitis en niños

¿La amigdalitis es contagiosa? Sí. La mayoría de los casos, especialmente los de origen viral o bacteriano, se transmiten por contacto directo con secreciones respiratorias.

¿Cuándo es necesario operar las amígdalas? Cuando hay infecciones recurrentes, problemas respiratorios como apnea del sueño o dificultades para tragar.

¿Es riesgosa la operación de amígdalas? Es una cirugía segura y común. Como toda intervención, tiene riesgos, pero con seguimiento médico adecuado, las complicaciones son poco frecuentes.

Te puede interesar…

Y tú ¿Qué opinas?
Escoge un avatar
avatar avatar avatar avatar avatar avatar avatar avatar avatar avatar avatar avatar avatar avatar avatar avatar avatar avatar avatar avatar avatar avatar avatar avatar avatar avatar avatar avatar avatar avatar avatar avatar avatar avatar avatar avatar avatar
Enviar Comentario
Comentarios (0)