Moretones, golpes y hematomas en los niños

15 Feb 2023
Moretones, golpes y hematomas en los niños

Los moretones, tan comunes en los niños, son manchas de color variable causadas por una hemorragia en el tejido subcutáneo. Cómo actuar si tu hijo se da un golpe.

Los moretones (equinosis) son manchas que tienen un color que varía del azul oscuro al violeta, al amarillo-verdoso y al marrón, causadas por hemorragias en el tejido subcutáneo. Los morados en los niños son muy frecuentes, porque aparecen en las zonas del cuerpo en las que el niño se ha golpeado accidentalmente. Se aclaran de forma gradual, cambiando de color, en 2-4 semanas. Los moretones o hematomas aparecen porque la acumulación de sangre se recoge en vesículas negro-azuladas, que después se reabsorben espontáneamente.

Cómo actuar en caso de hematomas e hinchazón

Después de sufrir una caída o un golpe, los hematomas y la hinchazón pueden aparecer rápidamente. A pesar de que los moretones (equinosis) tienden a atenuarse de forma espontánea, se puede intervenir para aliviar el dolor que surge como consecuencia del golpe. El reposo, el enfriamiento y la elevación de la lesión aliviarán los síntomas.

  • En primer lugar, hay que acomodar al niño. Eleva y apoya la zona lesionada para descansar el miembro y reducir la hinchazón y la molestia.
  • Seguidamente, para bajar la hinchazón, hay que aplicar una compresa fría sobre la lesión durante 30 minutos. Si es necesario, hay que sujetar la compresa con una venda.
  • Si el dolor es muy fuerte, se puede administrar al niño pararetamol, siempre bajo la prescripción del pediatra.
  • En el caso de que el niño se haya lesionado el brazo, hay que reducir el hematoma y la hinchazón poniendo el brazo en cabestrillo.

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Cómo aplicar las compresas frías

Aplicar una compresa fría ayuda a bajar la hinchazón y la molestia, ya que reduce el flujo sanguíneo en la zona.

  • Para realizarla, se puede utilizar un pedazo de tela mojado en agua fría, o bien llenar dos tercios de una bolsa de plástico con hielo, añadir un poco de sal, para que el hielo se deshaga y cerrar la bolsa. Después, hay que envolverla con un paño antes de aplicarla.
  • También se puede utilizar para el mismo fin una bolsa de verduras congeladas, como los chícharos o las habas, que actúan como las bolsas de hielo.
  • Una solución más sencilla consiste en mojar un trapo con agua, escurrirlo y aplicarlo sobre la lesión.
  • Seguidamente, hay que dejar actuar la compresa durante unos 30 minutos, preferiblemente sin cubrirla. Si necesitas sujetarla, usa una venda suelta.
DIRECTORA EDITORIAL MI BEBÉ Y YO. Experta en temas de embarazo, maternidad y paternidad, bebés y niños, y coordinadora de nuestra Agenda de Crecimiento.