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Muchos mamíferos se sientan, pero los humanos lo hacemos de una forma única, y de estilos muy diferentes. Sentados podemos usar las manos para agarrar cosas, jugar, relacionarnos y, sobre todo, ¡comer!
Que un bebé logre sentarse es un gran avance, pero ¿cuándo sucede esto? ¿Es bueno sentarlo antes de que esté listo? ¿Cómo lo ayudamos a que aprenda solito? Aquí te contamos todo lo que necesitas saber.
Los bebés empiezan a controlar su cuerpo, sobre todo su tronco y cabeza, para sentarse alrededor de los 4-6 meses. Al principio se van de lado como si se doblaran, luego se apoyan con las manos en el piso, después aguantan un ratito sin apoyo, y poco a poco van controlando su cuerpo hasta que logran sentarse solitos y agarrar cosas.
Si el bebé no puede sentarse solo a los 9 meses, debemos sentarlo con nosotros, abrazándolo en el sillón para jugar o leer, o a la hora de comer.
Pero cuando está en el piso, déjalo jugar boca abajo. Esto le ayuda a moverse libremente, gatear, alcanzar objetos y explorar su entorno.
A veces, a los bebés de 3-4 meses los sientan en el piso con cojines alrededor y un juguete en la mano. Esto se conoce como "la prisión confortable": el bebé no puede sentarse ni pararse solo, y puede pasar mucho tiempo así con la espalda encorvada. ¡Esto no es bueno!
Solo en casos de enfermedad o retraso en el desarrollo se debe usar un soporte para sentar al bebé, y siempre con la guía de un fisioterapeuta.
Para sentarse solo, el bebé primero debe gatear. Desde esa posición, se va dejando caer hacia un lado hasta que logra sentarse con la espalda recta. Cuando un bebé ha sido sentado antes de tiempo, se nota que su espalda está encorvada y sus movimientos son torpes.
Sentarse solito es clave para empezar a comer alimentos sólidos alrededor de los 6 meses. A esta edad, el bebé ya controla su cuello y tronco, y puede comer en el regazo de un adulto o en una silla alta donde pueda apoyar los pies.
Los niños con problemas para controlar su cuerpo y sentarse tienen más dificultades para comer.
Siempre ha sido bueno que el bebé esté erguido para comer, incluso cuando toma leche materna. Esta posición ayuda a que la comida baje y previene que se ahogue o vomite. Pero a esta edad no puede estar erguido solo, necesita que un adulto lo cargue.
Poner al bebé en posición vertical desde la primera semana presenta grandes ventajas ya que permite que el bebé desarrolle el control de su cabeza, siga objetos con la mirada y fortalezca los músculos de su tronco.
De hecho, es malo que un bebé pase sus primeros 6 meses completamente acostado. Por eso, cargarlo es tan bueno, ya que es como si estuviera sentado, pero pegado a quien lo está cuidando.
Alrededor de los 9 meses, el bebé debe poder sentarse de diferentes formas: con apoyo, sin apoyo, con las piernas hacia un lado, como "caballero", con una pierna en flexión y la planta del pie apoyada, o en W.
Sentarse en W no es malo, como se creía antes. Esta posición le da mucha estabilidad al bebé para que pueda usar sus manos con precisión, como para apilar cubos o desarrollar juegos similares.
El problema es si el bebé solo se sienta así y no de otras maneras. Esto podría indicar que no se desarrolló bien en otras áreas, y puede tener problemas de postura en el futuro.
Sentarse es un paso clave en el desarrollo de un bebé. Si no puede sentarse solo a los 9 meses, hay que consultar al pediatra.
Para que aprenda a sentarse es importante que se mueva libremente, que lo carguen mucho y que pase tiempo boca abajo. ¡Y nunca hay que forzarlo a sentarse antes de tiempo!
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