Consejos para mejorar tu circulación y reducir la celulitis

Las várices, la hinchazón, las piernas cansadas, la retención de líquidos y la celulitis son diferentes síntomas de un mismo problema: una mala circulación sanguínea. La celulitis aparece cuando el cuerpo es incapaz de eliminar grasas y líquidos y éstos se acumulan formando antiestéticos nódulos de grasa, toxinas y líquido que forman la piel de naranja. La circulación sanguínea juega un papel clave a la hora de eliminar la celulitis, ya que ésta aparece como consecuencia del mal flujo sanguíneo. 

Cómo mejorar la circulación sanguínea: consejos generales

La clave para evitar la celulitis y otros problemas relacionados con una mala circulación es llevando a cabo toda una serie de premisas que ayudan a mejorar la circulación sanguínea. Aquí van los consejos generales que debes tener en cuenta: 

• Alimentarte de forma equilibrada: dentro de tus hábitos de vida, es importante que lleves a cabo una buena alimentación. El consumo de cierto grupo de alimentos contribuye significativamente a evitar molestias como la hinchazón, la pesadez y la retención de líquidos, los cuales suelen acompañar e intensificar diversos trastornos circulatorios. Por ejemplo, una dieta rica en sal y grasas saturadas resulta tanto deficiente como perjudicial para el organismo.
• Realizar ejercicio moderado: los aerobics, la gimnasia y todo tipo de ejercicio moderado que requiera el movimiento de tus piernas será muy beneficioso para mejorar tu circulación. Al contrario, las pesas o los ejercicios que requieran un esfuerzo excesivo. Así pues, toma nota de practicar actividades que precisen de un trabajo suave y constante de las piernas.

• Controlar el estrés: debes tener en cuenta que el estrés, especialmente el crónico, es el peor enemigo del organismo, por lo que debes evitarlo en la medida de lo posible. El estrés suele provocar problemas de salud varios, desde dolores musculares hasta problemas de ansiedad y, también, trastornos relacionados con la mala circulación. 
• Ser constante con los masajes con cremas anticelulíticas: las cremas anticelulíticas ayudan a activar la circulación, pero requieren de una constancia. Así que utiliza tu crema a diario, especialmente en las zonas más afectadas, como piernas y muslos.

Cómo mejorar la circulación sanguínea en las piernas

Más allá de seguir una buena alimentación y realizar deporte moderado de forma regular, existen algunas formas de mejorar la circulación sanguínea en las piernas, la zona del cuerpo que se encuentra más afectada por la mala circulación. Toma nota:

• Evita permanecer de pie, quieta o sentada largos períodos de tiempo: cuando por motivos de trabajo o viajes largos debes estar mucho tiempo sentada, es aconsejable utilizar un reposapiés y evitar cruzar las piernas. Intenta, siempre que te sea posible, mover los pies y realizar breves paseos. 
• Acuéstate un rato con las piernas arriba a diario: con el fin de reactivar la circulación sanguínea de las piernas, es aconsejable que las eleves por encima del nivel del corazón. En este sentido, es recomendable que levantes las piernas a diario, un ratito, mientras estás acostada.

• Utiliza medias terapéuticas: si tu problema de mala circulación es grave, intenta apostar por esta medida y utiliza unas medias terapéuticas.
• Activa el riego sanguíneo con una ducha y un masaje: al finalizar la ducha diaria, aplícate agua fría sobre las pantorrillas en sentido ascendente para aliviar la sensación de pesadez. También es recomendable que lleves a cabo un masaje con gel frío, desde el pie a la rodilla en sentido ascendente para activar el retorno sanguíneo. Por último, termina la ducha con agua fría. 
• Utiliza calzado y ropa que no sean ajustados: las prendas de ropa muy ajustadas no son aconsejables, ya que pueden dificultar el retorno venoso desde las piernas al corazón. También es recomendable utilizar un calzado cómodo, evitando un tacón excesivo.
• Evitar el exceso de calor: las altas temperaturas favorecen la dilatación de las venas, así que es importante evitar las fuentes de calor dirigidas directamente a las piernas, como la cera caliente.
• Realiza masajes en las piernas, de los tobillos a las ingles: siempre que tengas un momento, mientras estés viendo la televisión o leyendo un libro, aprovecha para masajearte las piernas, de los tobillos a las ingles. El movimiento beneficiará la circulación y evitará, en parte, la retención de líquidos.

Qué tomar para mejorar la circulación

Toma nota de los alimentos que debes ingerir y los que debes evitar para mejorar tu circulación sanguínea:

• Verduras y hortalizas: preferentemente crudas o al vapor, deben ser la base de la dieta. 
• Infusiones: son grandes aliadas para evitar la mala circulación. El naranjo amargo, la hamamelis, el rusco o la vid roja son algunas de las infusiones que te ayudarán a mejorarla.
• Vitamina E: el salmón, el atún, los cacahuates, las olivas, los huevos, el pollo o los derivados de la leche son alimentos ricos en esta vitamina, que debes consumir regularmente. La vitamina E es un vasodilatador. Por eso, su ingesta es muy beneficiosa para la circulación sanguínea.

• Disminuye la sal en las comidas: niveles altos de sodio en la sangre dificultan la eliminación de líquidos, lo que se traduce en celulitis y una circulación menos fluida. Por eso, te recomendamos que disminuyas la sal en tus comidas. En su lugar, puedes aderezar tus platos con cualquier esencia o hierba aromática.
• Vitamina C: aumenta su ingesta, ya que, además de sus propiedades antioxidantes contra el envejecimiento, la vitamina C es muy beneficiosa para la circulación. Frutas como la mandarina, la naranja o el kiwi son muy ricas en esta vitamina.
• Potasio: también deberías aumentar su ingesta, ya que ayuda a eliminar el exceso de líquidos en el cuerpo. Entre los alimentos ricos en potasio se encuentran las frutas frescas, de las cuales, la más rica en este elemento es el plátano.
• Cereales integrales: consume habitualmente, ya que son alimentos muy beneficiosos para una buena circulación, mejoran el tránsito intestinal y evitan el estreñimiento, un síntoma que beneficia el estancamiento de los líquidos del cuerpo.
• Evita la nicotina y el alcohol: la nicotina aporta toxinas a nuestro organismo y en el caso del alcohol, un consumo muy moderado puede llegar a mejorar la circulación, pero una dosis superior eleva la presión sanguínea.
• Evita la bollería: rica en grasas saturadas, la bollería es una de las peores enemigas de una buena circulación. Su consumo favorece la aparición de altreraciones vasculares.
• Bebe mucha agua: el agua es muy beneficiosa para desintoxicar el cuerpo y eliminar todos los líquidos que sobran en el organismo. Es recomendable beber un mínimo de dos litros de agua al día.

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