Por qué ocurre la incontinencia urinaria durante el embarazo

19 Dec 2025
mujer embarazada haciéndose pipí

La incontinencia urinaria en el embarazo es más común de lo que se cree y suele generar dudas, vergüenza o preocupación. Aunque no es peligrosa, tampoco debe normalizarse: entender por qué ocurre y cómo controlarla puede mejorar significativamente tu bienestar durante esta etapa.

La incontinencia urinaria durante el embarazo

La incontinencia urinaria se refiere a la pérdida involuntaria de orina, que puede presentarse al reír, toser, estornudar, caminar rápido o incluso al sentir una urgencia repentina por ir al baño.

Durante el embarazo, esta situación es frecuente debido a una combinación de factores fisiológicos normales. Sin embargo, como explica el Dr. Rafael Solano, especialista en Ginecología, Obstetricia y Urología Ginecológica, no debe alarmarte, pero tampoco normalizarse, ya que suele indicar que el piso pélvico está sometido a una carga importante.

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Es importante aclarar que tener escapes urinarios no significa que algo esté mal con el embarazo, sino que el cuerpo está atravesando adaptaciones intensas.

¿Por qué sucede la incontinencia urinaria en el embarazo?

Cambios hormonales inevitables

Uno de los principales factores es el aumento de progesterona, una hormona clave durante la gestación. Su función es relajar los tejidos para preparar el cuerpo para el parto, pero esta relajación también afecta los músculos que sostienen la vejiga y la uretra, disminuyendo su capacidad de contención.

Crecimiento del útero y presión sobre la vejiga

Conforme el embarazo avanza, el útero crece y ejerce presión directa sobre la vejiga, reduciendo su capacidad de almacenamiento. Esto explica por qué muchas mujeres sienten ganas de orinar con mayor frecuencia.

Segundo y tercer trimestre: mayor incidencia

Los escapes de orina suelen intensificarse en el segundo y tercer trimestre, especialmente durante actividades cotidianas como caminar, cargar peso ligero o hacer un esfuerzo mínimo. Algunas mujeres presentan principalmente urgencia urinaria, mientras que otras experimentan pérdidas al realizar movimientos bruscos.

Todo esto forma parte de la fisiología del embarazo, aunque también puede estar relacionado con una disfunción del piso pélvico que sí puede y debe tratarse.

Lo que sí ayuda (y mucho) a controlar la incontinencia

La buena noticia es que existen estrategias seguras, efectivas y recomendadas incluso desde el primer trimestre. En algunos casos, el tratamiento definitivo se completa después del nacimiento del bebé, pero muchas mujeres experimentan mejoría durante la gestación.

Ejercicios de piso pélvico (Kegel)

Los ejercicios de Kegel, cuando se realizan correctamente, fortalecen los músculos que sostienen la vejiga, el útero y la uretra.
El Dr. Solano enfatiza que lo ideal es aprenderlos con un especialista, ya que muchas mujeres creen realizarlos bien, pero activan músculos incorrectos. Con la técnica adecuada, los resultados pueden notarse en pocas semanas.

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Vaciamiento programado

Establecer horarios regulares para ir al baño ayuda a entrenar la vejiga y reducir episodios de urgencia. No se trata de aguantar, sino de darle estructura al hábito urinario.

Hidratación inteligente

Reducir el consumo de agua no es la solución. De hecho, concentrar la orina puede empeorar la urgencia. Lo recomendable es distribuir los líquidos a lo largo del día, evitando grandes cantidades de golpe.

Fisioterapia de piso pélvico

Cada vez más mujeres incorporan la fisioterapia de piso pélvico a su seguimiento prenatal. Es segura durante el embarazo, ayuda a controlar los síntomas urinarios y prepara el cuerpo para el parto y la recuperación posparto.

¿Cuándo es importante consultar a un especialista?

Aunque la incontinencia urinaria durante el embarazo suele ser transitoria, siempre es recomendable una valoración médica para identificar el origen específico de la pérdida de orina.

No hay que acostumbrarse a vivir con escapes pensando que son “normales”. En la mayoría de los casos, una evaluación adecuada y algunas semanas de trabajo dirigido generan una mejoría notable.

Buscar orientación temprana permite descartar otras causas, recibir tratamiento oportuno y vivir el embarazo con mayor comodidad y confianza.

La incontinencia urinaria en el embarazo es una consecuencia frecuente de los cambios hormonales y físicos, pero no debe ignorarse ni normalizarse. Existen herramientas efectivas y seguras para controlarla, desde ejercicios específicos hasta fisioterapia especializada.

Hablar del tema es el primer paso para solucionarlo. Con información, acompañamiento médico y constancia, la incontinencia urinaria tiene solución y no debe restarte tranquilidad durante esta etapa tan importante.

Preguntas frecuentes sobre incontinencia urinaria durante el embarazo

¿La incontinencia urinaria afecta al bebé?

No. La pérdida de orina no pone en riesgo al bebé ni al embarazo, pero sí puede afectar la calidad de vida de la madre.

¿Es normal tener escapes después del parto?

Puede ocurrir, especialmente si el piso pélvico quedó debilitado. Con ejercicios y fisioterapia, la mayoría de los casos mejora.

¿Cuándo debo preocuparme por la incontinencia?

Cuando los escapes son constantes, empeoran o afectan tu rutina diaria. En esos casos, es fundamental acudir con un especialista.

Autor

DR-RAFAEL-SOLANODR. RAFAEL SOLANO 

Especialista en Ginecología y Obstetricia | Subespecialista en Urología Ginecológica

https://rafaelsolano.net/