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Tiene miedo a la oscuridad
¿Se despierta a media noche y llora porque siente mucho miedo de estar solito? Mira con atención este video y descubre cómo puedes ayudar a tu peque si tiene miedo a la oscuridad.
De los tres a los seis años, la oscuridad es una dimensión desconocida para el niño. Para el pequeño está poblada de peligros y monstruos, invisibles y aterradores. Es muy problable que esta fantasía nazca del miedo a la soledad y al abandono, y se acentúa precisamente durante la noche, cuando los padres están alejados. Se despierta por la noche y se encuentra solo, desorientado, sin puntos de referencia que lo tranquilicen. El corazón empieza a latir descontrolado y el pequeño empieza a llorar.
¿Qué podemos hacer para ayudarlo?
Para animarlo a irse a la cama contento y superar el miedo a la oscuridad, es importante que el niño asocie el momento de acostarse con una serie de actividades agradables y tranquilizadoras. Si acompañas la fase de transición al sueño con ternura y mimos, lo ayudarás a tranquilizarse y le harás más agradable un momento que para él es difícil, en que debe separarse de las personas amadas. Por eso, es útil establecer rituales de buenas noches que podrán modificarse o elaborarse según sus necesidades.
Al niño le cuesta aceptar la idea de separarse de sus padres o de los interesantes juguetes con los que está, para irse a dormir. Es muy importante hacerle participar activamente en el ritual de las buenas noches, para darle la sensación de que tiene todo controlado. Por ejemplo, déjale escoger la pijama que se va a poner, el muñeco que lo va a acompañar o el cuento que le vas a leer. De vez en cuando, a los pocos minutos de haberlo acostado, se puede volver a entrar a su habitación para darle algún mimo adicional. De este modo, tendrá la confirmación de que, incluso mientras duerme, sus padres están cerca.
No es necesario acudir a su lado cada vez que llame. A menudo, él solo encuentra una forma de consolarse. Abraza a su osito o arruga el borde de la manta entre los dedos. Por eso, es aconsejable esperar, al menos, un minuto antes de intervenir.
Antes de llevarlo a la cama, dale seguridad diciéndole que estás cerca y que velas por él para que nada pueda sucederle.
Cuando habla de monstruos bajo la cama o de ladrones ocultos en el armario, no cometas el error de verificarlo ya que, para él, supondría la confirmación de que lo que dice es cierto. Si lo desea, déjale una lámpara encendida por la noche.