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Cómo tener una buena higiene de los genitales si eres hombre. ¡5 consejos de oro!
Un hombre limpio y cuidadoso con su aspecto es más atractivo a ojos de otras personas, pero, además, se siente mejor y protege su salud. Sí, porque la higiene no solo sirve para oler bien, sino también para protegernos de infecciones y molestias desagradables. ¡Hablemos sin rodeos de la higiene íntima masculina!
¡Se acabaron los estereotipos anticuados sobre el olor que debe desprender un hombre para resultar atractivo! Como todas las personas, los hombres resultan más agradables y atractivos si huelen bien y si su aspecto está cuidado.
Dicho esto, llegamos a una zona crítica en cuanto a la higiene y el aseo se refiere: los genitales masculinos. Por su localización y las funciones que realiza, la zona íntima de los hombres es susceptible de ser un terreno abonado para la proliferación de bacterias. Estos huéspedes indeseados son los causantes del mal olor cuando la higiene no es adecuada ni frecuente.
(Te interesa: Más consejos de higiene íntima masculina)
Causas del mal olor en los genitales masculinos
Como hemos visto, las bacterias y otros gérmenes pueden multiplicarse en los lugares cerrados y húmedos... como es el área genital. Los desencadenantes son los diferentes fluidos que coinciden en la zona:
- Sudor.
- Restos de semen.
- Restos de jabón mal enjuagado.
- Restos de orina.
- Restos de heces.
El cóctel de residuos degradándose es una especie de resort para las bacterias y los gérmenes, con pulserita de "todo incluido". Visto así, se entiende perfectamente la importancia de una correcta higiene diaria de los genitales masculinos.
Consecuencias de una mala higiene íntima masculina
El problema de la falta de higiene en la zona íntima masculina no es únicamente el mal olor, sino, sobre todo, las consecuencias que un aseo inadecuado puede tener para la salud del hombre, tanto a nivel local como más general. A saber:
- La región genital masculina es una zona del cuerpo propensa a sufrir infecciones. La expulsión de orina y semen puede favorecerlo pero, además, la piel de la zona es muy sensible al roce. En esta zona, se acumula sudor, lo que puede facilitar la proliferación de bacterias y hongos si no se lava diariamente.
- Además de molestias como picor, irritación, enrojecimiento, erupción cutánea e hinchazón, una infección descuidada puede complicarse y requerir de intervención médica y medicación.
- Existen momentos críticos, que requieren que seas más cuidadoso con tu aseo genital: cuando hace más calor y sudas mucho, después de haber practicado deporte o después de mantener relaciones sexuales, por ejemplo.
5 tips de higiene íntima para unos genitales masculinos saludables
Sigue estos simples pasos para mantener tus genitales higiénicos y saludables.
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Elige un producto adecuado
En la ducha, es importante lavar a diario y correctamente los genitales, con un producto de pH adecuado para la zona íntima masculina (existen líneas masculinas en farmacias y supermercados) y abundante agua.
No solo hay que limpiar la superficie del pene, sino también retraer el prepucio para que el agua y el jabón también actúen en la zona del glande.Es recomendable utilizar un jabón neutro. Tras limpiar bien los órganos sexuales, no olvides enjuagar con mucha agua, ya que los restos de jabón favorecen las irritaciones.
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Higiene diaria y no solo del pene. ¡Pero respetando la zona!
Es importante limpiar todas las partes de la zona íntima. No te olvides de limpiar bien los testículos y presta también mucha atención a las zonas inguinales, ya que un exceso de humedad o sudor son el ambiente idóneo para la proliferación de hongos y bacterias. -
Ropa interior de algodón y no excesivamente apretada
Asegurar la transpiración del sudor es fundamental, Además, conviene que la sangre pueda circular sin el obstáculo del ajuste excesivo. -
No utilizar desodorantes ni perfumes en los genitales
No son productos adecuados para esta zona tan delicada y podrían provocar irritaciones y erupciones. -
¡Ojo con el rasurado!
Rasurarse en exceso tampoco es conveniente. El vello púbico y el resto de la zona genital y perianal está ahí por algo, para proteger la zona, precisamente, de irritaciones e infecciones. La depilación, si decides recurrir a ella, siempre debe dejarse en manos de profesionales, que utilizan técnicas y productos adecuados.