Los peligros del alcohol en el embarazo

3 Dec 2019
Peligros del alcohol en el embarazo

Es bien sabido que el alcohol está prohibido durante el embarazo. Ahora, una impactante campaña lanzada en Italia el pasado 9 de septiembre recuerda los peligros que supone. 

Algunos bebés se desarrollan con el riesgo de sufrir daños graves en su crecimiento y desarrollo neurológico porque su madre bebe alcohol durante el embarazo. Se trata de algo que está más que prohibido durante todo el proceso de gestación. Para recordar a las futuras mamás los peligros que supone consumir alcohol en el embarazo, el pasado 9 de septiembre, con motivo del Día Internacional del Síndrome del Alcoholismo Fetal, se lanzó una campaña con el lema: "Demasiado joven para beber". Bajo el lema se puede ver al feto atrapado en una botella de cerveza, vino, champán o vodka.

¿Qué sucede cuando la embarazada bebe alcohol?

Cuando la futura mamá toma, también lo hace el bebé. El alcohol ingerido por la mujer llega unos minutos más tarde al torrente sanguíneo del feto. Sin embargo, el feto no puede metabolizar el alcohol porque no posee las enzimas necesarias para hacerlo y, por lo tanto, no puede reducir sus efectos tóxicos. Las consecuencias de esta situación varían según el mes de gestación en el que se encuentra la embarazada y, por supuesto, según la cantidad de alcohol ingerida. Durante el primer trimestre del embarazo, la ingesta de alcohol puede provocar deformidades físicas al bebé, mientras que en los meses posteriores aumenta el riesgo neurológico, que puede causar retraso mental, más o menos grave.

Los expertos aseguran que durante el embarazo no se puede beber nada de alcohol, ya que actúa como una droga, alterando el funcionamiento correcto del cuerpo: afecta la presión arterial, el sistema renal y el estado de ánimo. Con la campaña lanzada el 9 de septiembre, se pretende concienciar a las embarazadas, ya que muchas de ellas todavía desconocen los riesgos del consumo de alcohol para el bebé.

¿Se puede beber alcohol durante la lactancia?

El bebé puede verse igualmente afectado, ya que el alcohol que consume la mamá pasa a la leche. Ello puede provocar somnolencia, pérdida de apetito y dificultad en el crecimiento del bebé. Lo más indicado es que la mamá se abstenga de ingerir alcohol si alimenta al bebé mediante la lactancia materna. 

(Te interesa: Tabla de crecimiento del bebé)

REDACTORA MI BEBÉ Y YO. Coordinadora de la sección Mujer Hoy, y experta en embarazo, bebés y niños.