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¿Cómo trabajar un cambio de mentalidad en el embarazo?
Cultivar una mentalidad positiva durante el embarazo te ayudará a prepararte para el parto y la maternidad, convirtiéndote en el mejor ejemplo para tus hijos. Pero ¿cómo llevar a cabo este cambio de mentalidad? La experta te guía en todo este proceso.
El embarazo no solo es un momento de cambios físicos, sino también emocionales y mentales. Durante esta etapa, muchas mujeres experimentan una amplia gama de emociones, desde la alegría hasta la ansiedad y el miedo. Trabajar en un cambio de mentalidad durante el embarazo puede tener un impacto significativo en el bienestar emocional de la madre y en la salud y el desarrollo del bebé.
¿Por qué cambiar tu mentalidad durante el embarazo? ¡5 razones de peso!
Para que logres generar cualquier tipo de cambio en la vida, tu cerebro necesitará tener claridad del beneficio que este le aportará. Conocer qué podrás lograr tú y tu bebé con el trabajo de cambio de mentalidad te dará el motor para tomar acción. Veamos las cinco razones por las que cambiar tu mentalidad durante el embarazo no debe ser negociable:
1. Una mejor salud mental
Trabajar en tu mentalidad durante el embarazo reducirá los niveles de estrés, ansiedad e incluso te ayudará a prevenir la depresión posparto: las mujeres que manejan adecuadamente sus emociones y pensamientos durante el embarazo tienen menos probabilidades de experimentar depresión posparto, una condición que puede afectar seriamente su bienestar y su capacidad para cuidar al bebé.
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2. Un mejor desarrollo cerebral del bebé
El estado emocional de la madre puede influir en el desarrollo neurológico del feto. El estrés crónico y la ansiedad pueden liberar hormonas como el cortisol, que, a niveles elevados, pueden afectar negativamente al desarrollo cerebral del bebé.
Incluso el sistema de pensamientos y emociones maternas puede influir en el temperamento del pequeño. Un ambiente emocionalmente positivo durante el embarazo puede contribuir a un mejor desarrollo emocional del niño.
3. Fortalecimiento del vínculo entre madre y bebé
Las emociones y los pensamientos positivos fortalecen el vínculo prenatal entre la madre y el bebé, preparando el terreno para una relación más sólida y saludable después del nacimiento. La mamá consigue así ser más capaz de responder adecuadamente a las necesidades del bebé, promoviendo un ambiente seguro y afectuoso para su desarrollo.
4. Una mejor salud general
Las mujeres que están emocional y mentalmente equilibradas tienden a adoptar comportamientos más saludables durante el embarazo, como una buena alimentación, ejercicio regular y evitar sustancias nocivas, lo cual beneficia tanto a la madre como al bebé.
5. Mayor inmunidad y rápida recuperación posparto
El cambio de mentalidad puede fortalecer el sistema inmunológico de la madre, lo que puede resultar en menos complicaciones durante el embarazo y en la recuperación más rápida después del parto.
¿Por dónde empezar? ¡Conoce en qué punto estás!
Estos son algunos beneficios que podrás disfrutar si decides trabajar desde ya en un cambio en tu sistema de pensamientos durante el embarazo. Ahora te preguntarás: ¿por dónde empiezo?
Para generar cualquier cambio o mejora en tu vida, lo primero que tienes que saber es en qué punto estás actualmente. ¿Cómo podrías evaluarte? Desarrollando la habilidad de autobservación y registro.
Puedes escribir en un diario el registro de tus pensamientos y emociones diarias. Proponte crear el hábito de escribir sobre ellos durante un período de 5 a 20 días. Anota las emociones, las situaciones y los pensamientos intrusivos que desencadenan en ti pensamientos positivos, negativos o irracionales. El objetivo de esta parte es solo registrar; no te juzgues, no corrijas, céntrate en observar y escribir.
Al terminar el tiempo propuesto de evaluación, identifica qué patrones de tus pensamientos y emociones desatan una actitud positiva o negativa en ti. Pregúntate: ¿existen reacciones recurrentes que te hacen sentir de cierta manera? ¿Qué indicador de pensamientos tienes con más frecuencia? Clasifícalos en positivos (optimismo, resiliencia, autocompasión, gratitud, empatía, confianza en ti) o negativos (pesimismo, autocrítica, catastróficos, consistentes, desesperanza, responsabilizar a los demás de lo que te pasa, victimismo...).
Del resultado que arrojó el diario, escoge una situación, reacción o comportamiento que te gustaría mejorar antes de que nazca tu bebé, y pregúntate qué pequeño paso puedes empezar a dar “hoy” para mejorarlo y lograr tener control mental de esa situación.
Ten muy claro qué no quieres hacer y proponte todos los días ser consistente con la nueva versión y el nuevo sistema de mentalidad que quieres lograr. Una vez sientas que ya lo sabes gestionar, ve por lo siguiente que quieres mejorar.
Los 7 pasos que te llevarán a una mentalidad más positiva
Una vez has realizado esta autobservación, lo siguiente es poner en práctica los pasos que debes dar para iniciar tu cambio a una mentalidad positiva. ¡Son estos!
1. Autoconocimiento y aceptación
Reconocer y aceptar las emociones y preocupaciones que surgen durante el embarazo es fundamental para iniciar un cambio de mentalidad. Un estudio publicado en el Journal of Obstetric, Gynecologic & Neonatal Nursing encontró que las mujeres que practicaban la autoaceptación durante el embarazo tenían niveles más bajos de ansiedad y depresión posparto.
Aceptar las emociones negativas en lugar de ignorarlas o suprimirlas puede ser beneficioso para la salud mental durante el embarazo. Es esencial que, en esta parte de aceptación, también seas capaz de ver en qué pensamientos y acciones tú eres 100% responsable y qué cosas tienen que ver con terceras personas. Recuerda que solo puedes cambiar lo que está en ti.
2. Cuestiona tus creencias
Una vez te des cuenta de tu estado actual, cuestiona la veracidad de los pensamientos limitantes o negativos que tienes. Pregúntate: “¿esto es realmente cierto?”, “¿qué evidencia tengo a favor o en contra de esta situación o pensamiento?”, “¿estoy generalizando o siendo absolutista?”, ¿cuál es la raíz de lo que estoy pensando?”, “¿es mía esa creencia realmente o estoy repitiendo opiniones y creencias aprendidas?”.
3. Reformula esos pensamientos
Transfórmalos en afirmaciones que refuercen una mentalidad positiva y repítela. Levántate cada mañana con la misión de compartir tu lenguaje positivo cambiando la forma en la que te hablas a ti misma.
4. Visualización positiva y afirmaciones
La visualización positiva y las afirmaciones pueden ayudar a las mujeres a cultivar una mentalidad positiva durante el embarazo. Empieza creando una visualización de la identidad y del comportamiento que te gustaría adoptar en cada situación desafiante o que te hace perder la mentalidad positiva que estás cultivando. Esto te ayudará a reforzar mentalmente tu visión de lo que quieres alcanzar y mantener el enfoque.
5. Cuida tu entorno
Durante el embarazo, puedes llegar a ser mucho más susceptible y emocional ante ciertas situaciones, enfócate en rodearte de personas que te aporten pensamientos positivos, que te inviten a crecer, a sacar tu mejor versión.
El entorno no solo hace referencia a nuestras familias y amigos, sino también a lo que vemos en las redes sociales y los medios de comunicación, y en lo que leemos. Asegúrate de estar en un ambiente que te impulse y vaya acorde con la mujer en quien te quieres convertir.
6. Flexibilidad mental y adaptabilidad
Durante el embarazo, es importante ser flexible en las expectativas y estar preparada para adaptarse a los cambios que puedan surgir. Aceptar las adversidades y reconocer que son parte del proceso te ayudará a bajar la presión y la carga emocional y te entrenarás para ver los desafíos como una oportunidad de crecimiento.
7. Atención plena
Estar presente en el momento y reducir la negatividad es fundamental para que este proceso se lleve a cabo. Una estrategia que puedes utilizar es programar alarmas diarias en momentos puntuales que sabes que estás más cansada y que tu mentalidad negativa sale a relucir. En ese momento, date unos minutos en silencio para estar en calma contigo misma. Esta simple acción te ayudará a calmar tu mente, agradecer y reforzar una mentalidad positiva.
En resumen...
Tomar la decisión de construir una mentalidad sólida durante el embarazo no solo será un regalo para ti, sino una hermosa herencia para tus hijos, que merecen tener una mamá fuerte y con el suficiente coraje para seguir trabajando en ella. Esa mamá que es una mujer imperfecta, pero que se ama y respeta tanto, que está comprometida con dar a sus hijos el mejor ejemplo de crecimiento y amor propio.
Todo empieza por tu mente: no puedes aspirar a ser una mejor mamá, profesional, mujer, líder en tus proyectos si no logras gestionar tu sistema de pensamientos. ¿No te parece que lograrlo es un hermoso propósito?