Si los papás deciden que su bebé duerma solito en su propia habitación, ¿sabes cuál es la mejor edad para pasar al bebé a su cuarto? ¿Y cómo hacer una transición tranquila de la habitación de los papás a la suya propia? Te damos unos consejos prácticos.
"Nos gustaría que el bebé durmiera en su propia habitación, pero no sabemos cuándo es el mejor momento ni cómo realizar la transición del cuarto de los papás a la habitación del bebé". Son muchos las mamás y los papás que se encuentran en este dilema en lo que respecta al sueño del bebé. ¿Te identificas?
¿Cuál es la mejor edad para pasar al bebé a su propia habitación sin traumas?
La edad para pasar a un bebé a su habitación depende de diversos factores y es una decisión personal. Por lo tanto, no existe una edad ideal, sino que depende de la convicción y las necesidades de los padres.
Sin embargo, si los papás toman la decisión de que el bebé duerma en una habitación propia, habitualmente,este cambio no se realiza más allá de los siete u ocho meses, momento en el que suele aparecer la ansiedad por separación, una etapa transitoria en la que el bebé se siente “abandonado” cuando deja de ver a su mamá o su papá y, además, es mucho más consciente de su entorno. A partir de ese momento, suele ser mucho más difícil hacer la transición.
En todo caso, el paso del bebé a una habitación propia no es obligatorio, y depende más bien de la decisión y la convicción de los papás. El bebé puede seguir durmiendo en la misma habitación de los padres, tanto si practican colecho como si tienen la cuna dentro de la habitación, hasta el momento que consideren oportuno, en función de sus necesidades y las de su hijo.
Inconvenientes de pasar al bebé a su habitación
Si el bebé todavía se despierta por la noche para la toma, los papás deben levantarse y desplazarse. Esto es especialmente engorroso para las mamás que dan el pecho, puesto que siempre son ellas las que se levantan.
El bebé puede tardar más tiempo en volver a quedarse dormido, puesto que, durante el desplazamiento de los papás, se despierta más, por lo que también le cuesta más tiempo volver a conciliar el sueño.
Consejos prácticos para una transición tranquila y segura
Es muy práctico disponer de un intercomunicador para controlar el bienestar del pequeño en todo momento.
Es preferible que la habitación del bebé no esté muy alejada de la de los papás, siempre que sea posible, para poder acudir lo más rápido posible en caso de que se despierte.
Es bueno que la decisión de pasar al bebé a su habitación esté bien consensuada y que tanto el papá como la mamá estén convencidos y dispuestos a aceptar los posibles inconvenientes prácticos. De esta manera, se evitarán renuncias y malestares.
Y tú, ¿ya has pasado a tu bebé a su habitación o tienes pensado hacerlo? ¿A qué edad consideras que es más adecuado cambiarlo de habitación? ¡Déjanos tu comentario!