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Los 10 secretos del destete
El momento de darle su primera papilla es fundamental. Es el inicio de un recorrido que, en unos meses, conducirá al niño a una autonomía y a dejar de tomar leche materna de forma exclusiva. Te damos las 10 claves para afrontar este paso con tranquilidad.
- 1. ¿Cuándo se empiezan a introducir alimentos distintos a la leche?
- 2. ¿Qué alimentos se introducen primero en su dieta?
- 3. ¿Cuáles son los primeros cereales que se dan al niño?
- 4. ¿Cuándo se le pueden comenzar a dar dos purés o papillas al día al bebé?
- 5. ¿La carne es indispensable?
- 6. ¿Cuáles son las ventajas de las papillas envasadas?
- 7. ¿Cuándo se introduce la leche de vaca?
- 8. ¿Y si el pequeño tiene sed?
- 9. ¿Cuál es el mejor momento para introducir el pescado?
- 10. ¿Cómo introducir los huevos?
Comenzar a dar la papilla a tu bebé es un paso importante en su crecimiento y alimentación. Supone comenzar el destete y la introducción de nuevos alimentos progresivamente. Por ello, te ofrecemos los 10 secretos del destete:
1. ¿Cuándo se empiezan a introducir alimentos distintos a la leche?
Si el niño se alimenta al pecho, estará preparado para la primera papilla alrededor de los seis meses.
2. ¿Qué alimentos se introducen primero en su dieta?
Suele empezarse con la fruta porque, gracias a su sabor naturalmente dulce, resulta más fácil que el bebé la acepte. Pero, en realidad, nada impediría empezar con las verduras, también digestivas y ligeras, como la zanahoria, la papa y la calabaza (hervidas o al vapor con un chorrito de aceite de oliva).
3. ¿Cuáles son los primeros cereales que se dan al niño?
Se debe empezar por los cereales que no contienen gluten, como el arroz, el maíz, el mijo o el sorgo. Después de las primeras pruebas, se podrá aumentar la cantidad de forma gradual, introduciendo la sémola y la pasta de sopa, de tamaño pequeño. En cualquier caso, los cereales que contienen gluten (especialmente el trigo) no deben introducirse antes de los seis meses.
4. ¿Cuándo se le pueden comenzar a dar dos purés o papillas al día al bebé?
En general, la primera papilla que se introduce es la del mediodía, una vez transcurrido un mes desde el inicio de la alimentación complementaria, los purés diarios aumentan a dos, y también se introduce la papilla de la noche.
5. ¿La carne es indispensable?
La carne, que se puede introducir a partir de los 6-7 meses, es un alimento excelente para el crecimiento, pero no es indispensable. Se trata de una magnífica fuente de proteínas “nobles” (ricas en aminoácidos esenciales que el organismo no es capaz de producir solo) y aporta una considerable cantidad de hierro.
6. ¿Cuáles son las ventajas de las papillas envasadas?
Durante la introducción de nuevos alimentos, las papillas envasadas representan una excelente opción. Al estar homogeneizados, son muy digestivas y se conservan fácilmente durante mucho tiempo.
7. ¿Cuándo se introduce la leche de vaca?
A partir de los tres años: antes de esta edad, el intestino del pequeño todavía no es capaz de asimilar correctamente los nutrientes de la leche de vaca. Los expertos recomiendan dar leche de crecimiento a los niños de uno a tres años, ya que tiene más hierro y vitaminas que la leche de vaca, pero es menos proteica.
8. ¿Y si el pequeño tiene sed?
Durante la introducción de nuevos alimentos, el niño debe beber en abundancia. De hecho, con los purés, aumenta la carga de desechos que el riñón debe destruir, y el agua le ayuda en este trabajo.
9. ¿Cuál es el mejor momento para introducir el pescado?
El pescado es un alimento de los que provocan más alergias en los niños. Por este motivo, su introducción se retrasa hasta los 8-9 meses. Para empezar, se puede optar por las papillas envasadas, o bien por los pescados más fáciles de limpiar, como el lenguado, la merluza o la pescadilla.
10. ¿Cómo introducir los huevos?
El huevo es otro de los alimentos que comportan un riesgo elevado de alergia. Lo que da más problemas es la clara, razón por la que se empieza con la yema, ofreciendo al niño una pequeña cantidad (una cucharadita), añadida al puré, alrededor de los 9-10 meses. A continuación, se va incrementando la cantidad poco a poco, y se ofrece al niño un par de veces a la semana. Al año de edad, se le puede ofrecer también la clara, bien cocida, ya que el calor atenúa las propiedades alergizantes y facilita su digestión.