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Desayunos sanos para bebés y niños
21 Dec 2022
El desayuno es la comida más importante del día y, sin embargo, suele resultar poco abundante y apetitosa. Te explicamos la importancia del desayuno, de qué debe constar y te ofrecemos propuestas de desayunos sanos.
Temas en este artículo
El desayuno constituye la primera comida del día y, también, la más importante. A unas 10-12 horas de la cena, los niños necesitan acumular energía y empezar bien el día, aunque son pocos los que lo hace de verdad.
- Por este motivo, el desayuno se debe organizar como una comida ligera, que garantice el 20-25% de toda la necesidad energética diaria (lo que significa, al menos, 250-300 calorías para un niño de tres años).
- Asimismo, los componentes principales de un desayuno sano deben ser los carbohidratos, que son fáciles de digerir y de asimilar. También es necesario incluir alimentos que proporcionen vitaminas, sales minerales y proteínas. En cuanto a las grasas, es mejor que estén presentes en una cantidad reducida.
(Te interesa: Las sales minerales que tu hijo necesita)
Esquema clásico de desayuno sano
El esquema clásico, que incluye un vaso de leche, unas galletas y una pieza de fruta, es correcto desde el punto de vista nutritivo.
- Sin embargo, los hidratos de las galletas también se pueden sustituir por un plato de cereal, por pan, tostadas o pan casero, por ejemplo.
- En cuanto a la leche, fuente de calcio y de proteínas, se puede sustituir por licuados o yogur.
- También la fruta, rica en vitaminas, se puede proponer de diversas maneras: en macedonia, cocida o como ingrediente de un delicioso platillo.
Propuestas de desayunos sanos
Seguidamente, te proponemos tres desayunos sanos que están riquísimos y que son aptos para mayores y pequeños.
Copa rica de la mañana
En un bowl, vierte dos yogures naturales y mézclalos bien con dos cuchardas de miel. Pela dos manzanas y dos plátanos; corta las primeras en cubitos pequeños y los segundos, en rodajas finas. Añade la fruta y un puñado de pasas al yogur con miel, y mezcla bien. Divide la mezcla en cuatro porciones y decora cada una con una galleta.
Rosquillas trenzadas
Precalienta el horno a 180C. Disuelve 12 gramos de levadura de panadería en dos cucharadas de leche, añade 100 gramos de harina y trabaja la masa hasta obtener una especie de panecillo. En un bowl, pon la masa, cúbrela con un trapo y dejar que fermente un poco. Después, incorpora otros 170 gramos de harina, un huevo, 35 gramos de azúcar, la ralladura de un limón y cuatro cucharadas de leche. Trabaja la masa, haz una bola con ella, cúbrela con un trapo y deja que complete la fermentación, hasta que la masa alcance el doble de su volumen. Forma unos cilindros con la pasta y, utilizando dos al mismo tiempo, haz unas trenzas y ciérralas en forma de anillo. Dispon las rosquillas en una bandeja para horno, previamente untada con mantequilla y espolvoreada con harina. Bate un huevo, pinta con él la superficie de las rosquillas y hornear a 180C durante 30 minutos.
Delicias de pan con crema
Pela dos plátanos y cortarlos a rodajas. En un bowl, pon las rodajas de plátano, junto con 120 gramos de requesón, dos cucharadas de mermelada de frutos del bosque y tres cucharadas de piñones, y mezcla bien. Unta la crema obtenida sobre ocho rebanadas de pan integral y sirve dos para cada comensal.
Y tú, ¿tienes otras propuestas de desayunos sanos que quieras compartir con otras mamás? ¡Cuéntanoslo!
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