Te puede interesar…
- Mi bebé y yo
- Niños más inteligentes
- Crecimiento del niño
- Niños de más de 5 años
- ¿A qué edad pueden irse solos a la escuela?
¿A qué edad pueden irse solos a la escuela?
Cuando el niño crece, reclama más autonomía y quiere comenzar a irse solo o con los amigos, a la escuela. Pero, ¿qué hay que tener en cuenta para dejarlo ir sin un adulto?, ¿cómo sabes si está preparado para irse solo?
El pedagogo, Jerónimo García Ugarte, elaboró una pequeña guía para evaluar si los niños están preparados o no, para ir a la escuela solos.
¿Qué nivel de madurez tiene el niño?
Según el pedagogo, lo primero que debes tener en cuenta es su nivel de madurez. No todos los niños maduran a la misma velocidad ni a la misma edad. Debes asegurarte de que conoce las señales de tránsito: pasos peatonales, semáforos, etc. También debe tener claro que debe dirigirse a casa inmediatamente después de salir de la escuela. Si lo crees conveniente, dale un celular para tu tranquilidad y, si decides que no es el momento, enséñale a quién debe acudir en el caso que necesite ayuda.
¿Dónde viven?
El tipo de lugar donde viven también puede determinar si está preparado o no para irse solo. Según García, "no es lo mismo vivir en un pueblo o ciudad pequeña, en la que se puede ir y regresar caminando de la escuela, que en una gran ciudad, en la que se tiene que tomar algún o varios medios de transporte". Para un lugar pequeño, el niño puede volver solo entre los 9 y los 10 años. Si tiene que tomar el metro o el autobús, deberás esperar a los 12 años, como mínimo.
Cómo ponerlo en práctica
Para enseñar a tu hijo a irse solo a la escuela es recomendable hacer un "proceso por etapas". Por ejemplo, esperarlo en un punto intermedio y combinar días, en que se regrese solo, y otros, en los que vas a ir por él. Poco a poco, debes advertirle de los posibles peligros, aunque sin inculcarle el miedo a todo. Tu misión, como mamá, es hacer que preste atención a todos los elementos de la calle para que esté atento ante cualquier circunstancia o imprevisto.
Por último, ten en cuenta que este paso también forma parte de su madurez y, poco a poco, tendrás que ir dejándolo hacer más cosas por sí solo, aunque siempre pensando en cuidar de su seguridad.