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Las salchichas comerciales suelen tener conservadores, colorantes y un alto contenido de sodio. Esta versión casera, además de saludable, incluye vegetales sin que los niños lo noten. Algunas de sus ventajas:
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Coloca en un procesador de alimentos el pollo, la zanahoria y el betabel ya cocidos. Agrega el ajo y condimenta con sal y pimienta al gusto. Procesa hasta obtener una masa homogénea y bien integrada.
Extiende un trozo de film plástico y coloca una porción de la mezcla (como una cucharada grande) formando un cilindro. Envuélvelo bien y gira las puntas como si fuera un caramelo.
Hierve agua en una olla. Cuando esté en ebullición, coloca las salchichas (con todo y film) y cocina por 8-10 minutos. Retira y deja enfriar.
Quita el film con cuidado y dora las salchichas en un sartén con un poco de aceite hasta que tomen color. Sirve en pan para hotdog, acompañadas de vegetales, guacamole o mostaza.
Las salchichas de pollo con betabel y zanahoria son una alternativa deliciosa, colorida y nutritiva para consentir a tus hijos sin preocuparte por lo que están comiendo. Son ideales para hotdogs saludables, y una excelente forma de integrar verduras en la dieta infantil sin discusiones. Pruébalas, personaliza los ingredientes a tu gusto y verás que no querrás volver a las del supermercado.
¿Las salchichas caseras se pueden congelar? Sí. Se pueden congelar una vez cocidas y sin el film. Guárdalas en un recipiente hermético hasta un mes.
¿Puedo usar otro tipo de carne? Claro. Puedes hacerlas con pavo, carne de res magra o incluso sustituir por tofu firme si deseas una versión vegetariana.
¿Se notan las verduras? No. El color puede variar por el betabel, pero su sabor se integra muy bien con el pollo, haciendo que los niños no lo noten.
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