Slow Fit: ¡ponte en forma para el verano a ritmo pausado!

El llamado Slow Fit, un tipo entrenamiento lento, pausado y consciente, se basa en disciplinas milenarias como el yoga, el Qigong y diferentes artes marciales, y se podría decir que representa un modo de ponerse en forma de manera suave, combinando aspectos físicos de baja intensidad con otros que implican a la mente, la introspección y la respiración consciente. ¿Descubrimos más cosas interesantes sobre el Slow Fit, o Slow Fitness?

¿Qué es exactamente el Slow Fit, o Slow Fitness y en qué se basa para ponerse en forma?

Como ya hemos visto a grandes rasgos, el Slow Fit no es una manera de ponerte en forma que te haga sudar y agotarte, como el entrenamiento de alta intensidad (HIIT) que también se propone en los gimnasios y en las plataformas online de puesta en forma y entrenamiento personal.

El Slow Fit se basa en todo lo contrario, es decir, mejora el cuerpo y te libra de esos kilitos de más, que tanto nos gusta perder antes de las vacaciones de verano, pero sin tener que realizar esfuerzos físicos agotadores, justamente en tiempos de calor y de "flojera", por decirlo así.

El hecho de no requerir un esfuerzo físico tan grande, precisamente, consigue que las personas que practican este fitness suave tengan más ganas de practicar. Un esfuerzo menor, pero más continuado y frecuente, logra resultados tanto o más significativos que los del ejercicio tradicional más intenso.

Además, en tiempos de angustia, incertidumbre y estrés como los que vivimos, llevar una actividad que, además de física, concede la misma importancia a los momentos de quietud, de respiración consciente y de calma mental tiene un doble beneficio para nuestro bienestar interior y exterior. 

Beneficios del Slow Fit

A continuación, enumeramos los múltiples beneficios que la "gimnasia pausada y consciente" tiene tanto para el cuerpo como para la mente y la paz interior. ¡Te encantarán!

• Nos hace ganar flexibilidad y equilibrio.
• Aumenta la fuerza y la resistencia.
• Incrementa el control del propio cuerpo y lo armoniza.
• Aporta calma mental y reduce el nivel de estrés.
• Mejora la postura, aumentando la conciencia corporal.
• Trabaja la respiración consciente, principal herramienta para controlar la ansiedad y el estrés.
• Contribuye a la pérdida de peso.
• Regula diferentes funciones orgánicas, contribuyendo a la prevención de algunas enfermedades.
• Mejora nuestro estado de ánimo.

(Te interesa: Mindful Eating, alimentación consciente)

¿Por qué es la alternativa al entrenamiento de alta intensidad, o "cardio"?

Decimos que el Slow Fit no implica el esfuerzo físico del entrenamiento de alta intensidad ni te hace sudar, pero tampoco es exactamente así de literal. ¿Cómo debemos entenderlo, entonces?

• Slow significa “lento”, y el no ir tan deprisa es lo que nos centra y nos hace ser más conscientes de lo que estamos haciendo, de cómo estamos respirando y de qué partes del cuerpo estamos trabajando.
• El trabajo que realizamos en este entrenamiento es profundo. Mejora lo físico, pero también nuestro interior, y esto lo diferencia mucho del entrenamiento “clásico”, por decirlo así.
• Otra característica del trabajo suave es que se puede practicar en caso de lesión, adaptándolo a las necesidades de la persona, y que sirve tanto para prevenir ciertas patologías como para regular las que ya son crónicas.

Ejercicios de Slow Fit que puedes practicar

Para practicar Slow Fitness, te puedes dirigir a un entrenador personal o un centro fitness que incluya esta disciplina en su oferta. Para darte una idea, te proponemos unos ejercicios de yoga muy completos, que te pueden ayudar en tu rutina de Slow Fit. ¡Haz clic en el enlace!

EJERCICIOS DE YOGA SUAVES QUE TE AYUDAN A BAJAR EL RITMO

• Además, es ideal que combines los ejercicios con otro tipo de actividad física, tanto de alto impacto como de bajo impacto, en función de tu forma física inicial, tu motivación y tus necesidades. En cualquier caso, siempre es oportuno que te pongas en manos de profesionales, y no practiques sin tener unas nociones previas, para evitar hacerte daño.
• Un paseo diario, que se podrá incrementar en duración y velocidad a medida que pasen los días y las semanas, así como deportes como el trekking, la natación, y disciplinas como el yoga o el pilates, serán complementos perfectos para tu puesta en forma progresiva y suave.
• ¡Y no te olvides de la alimentación! Come sano, equilibrado, variado y apuesta por el aumento del consumo de frutas y verduras de temporada, legumbres, frutos secos y pescado. ¡Notarás la diferencia, por dentro y por fuera!

..........

¿Te parece importante, a la hora de ponerte en forma, trabajar la mente y la respiración? ¿Crees que te pondrías más en forma con un tipo de entrenamiento de alta intensidad? ¡Déjanos tu comentario!