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¿Qué cambios hay en la piel de una embarazada?
Durante el embarazo, se suelen producir cambios en la piel, que pueden llegar a ser muy evidentes y provocar cierta preocupación en las mujeres que los presentan. Prácticamente todos están mediados por las hormonas y suelen ser temporales. Conozcamos los más importantes.
- ¿Qué partes del cuerpo se ponen oscuras en el embarazo?
- ¿Cómo cambia el pelo y las uñas con el embarazo?
- ¿Cuáles son los cambios vasculares en el embarazo?
- ¿Qué es el épulis del embarazo?
- ¿Qué es el melasma y por qué sale?
- ¿Qué causa las estrías en el embarazo?
- ¿Por qué salen las varices en el embarazo?
- ¿Qué son los acrocordones y dónde aparecen en el embarazo?
- ¿Cómo debo cuidar la piel en el embarazo?
- Bibliografía
Los cambios en la piel son muy frecuentes durante el embarazo. En prácticamente el 100% de las futuras mamás, aparece hiperpigmentación en pezones y aréolas, genitales externos y línea alba abdominal.
Asimismo, un 50% de las embarazadas desarrolla melasma (también conocido como cloasma o “máscara del embarazo”), que se manifiesta en las zonas expuestas al sol, sobre todo en el rostro.
Las modificaciones en el tejido conectivo conducen a la aparición de estrías en el abdomen, las caderas y las mamas en un 90% de las gestantes.
La hiperemia también se manifiesta en alrededor del 30% de las mujeres embarazadas, como eritema palmar y/o angiomas.
Hoy en día, se cree que estos cambios en la piel están provocados por la influencia directa o indirecta de las hormonas sexuales y sus niveles durante el embarazo.
Algunos de estos cambios en la piel son fisiológicos, es decir, son absolutamente normales y están relacionados con la etapa del embarazo. Es el caso de la hiperpigmentación, los cambios vasculares o del cabello y las uñas, por ejemplo, que volverán a su estado inicial tras el puerperio.
Otros, en cambio, son imperfecciones en la piel, alteraciones benignas que no van a desaparecer al finalizar la gestación, por lo que su repercusión es, principalmente, de carácter estético. Dentro de este grupo, encontramos el melasma, las estrías o las varices.
Conozcamos, a continuación, los cambios fisiológicos y estéticos más frecuentes en la piel de la embarazada.
¿Qué partes del cuerpo se ponen oscuras en el embarazo?
La mayoría de las embarazadas, y sobre todo, las que tienen la piel y el pelo oscuro, notan un oscurecimiento generalizado en algunas zonas del cuerpo, que se atenuará después del parto.
Hacia las 12 semanas de gestación, los pezones, las aréolas, la vulva y la línea alba llegan a adquirir un color marrón más o menos oscuro.
Posteriormente, aparece una ampliación del color de la aréola mamaria o aréola secundaria. Esta hiperpigmentación puede extenderse al periné, al ano y a la cara interna de los muslos.
Asimismo, algunas mujeres perciben un incremento del tamaño, número y actividad de sus nevos melanocíticos.
¿Cómo cambia el pelo y las uñas con el embarazo?
Respecto a los cambios en el pelo y las uñas, muchas mujeres durante el embarazo refieren un crecimiento más vigoroso del cabello, aunque, tras el parto, se produce una compensación del mismo.
Un caso extremo de esta compensación puede llegar a producir una alopecia posparto, que se recupera espontáneamente entre tres y 12 meses después de dar a luz.
En algunas embarazadas, puede darse cierto grado de hirsutismo alrededor de la semana 20 de embarazo; no hay que preocuparse, pues desaparecerá tras el parto.
Asimismo, el crecimiento de las uñas está ligeramente aumentado. Además, puede que el lecho ungueal aparezca más oscuro y que las uñas se rompan con más facilidad.
¿Cuáles son los cambios vasculares en el embarazo?
Los cambios vasculares en las embarazadas se atribuyen a los altos niveles de estrógenos, ya que la hiperemia (aumento del volumen sanguíneo) se considera fisiológica durante el embarazo.
Las arañas vasculares aparecen entre el segundo y el quinto mes de embarazo en la cara, la parte superior del tronco, las manos y los brazos. La mayoría desaparecen espontáneamente en los tres meses siguientes al parto.
También es muy común el eritema palmar (que puede afectar al 70% de las gestantes), en el que se aprecia un color rojizo y moteado en las palmas de las manos o solo en algunas zonas, y que también desaparece después del parto.
Menos frecuentes son los puntos rubí, elevaciones puntiformes de color rojo vivo, a veces, pediculadas, que crecen lentamente hasta el tamaño de una lenteja, y que se dan fundamentalmente en la cara y el cuello a partir del tercer mes en un 5% de las mujeres gestantes. No necesitan tratamiento y, en algunos casos, desaparecen de forma espontánea después del parto.
¿Qué es el épulis del embarazo?
En algunas embarazadas, también puede aparecer una gingivitis hipertrófica, o incluso pequeñas lesiones vasculares conocidas como “épulis del embarazo”.
Esta alteración se localiza en las encías, que pueden sangrar fácilmente con el roce del cepillo durante la higiene bucal.
Después del parto, el problema desaparece, por lo que no hay que preocuparse en exceso, si bien puede llegar a resultar muy molesto para la futura mamá.
¿Qué es el melasma y por qué sale?
El melasma gestacional es una hiperpigmentación en forma de máculas (manchas) irregulares, simétricas, con contornos bien delimitados, que aparece en la frente, las mejillas, el labio superior y el mentón, con una distribución que recuerda la silueta de una cruz de Malta.
Aparece entre el 13% y el 75% de las mujeres embarazadas, sobre todo aquellas que tienen la piel oscura, y se considera que puede existir una predisposición familiar.
En cualquier caso, la acción de los rayos ultravioleta es indispensable para que el melasma se manifieste.
Una vez que el cuadro clínico se ha instaurado, su eliminación es difícil. El pronóstico depende en gran parte del nivel de la piel en el que se encuentra el pigmento.
¿Qué causa las estrías en el embarazo?
Las estrías suelen aparecer, sobre todo, a partir del sexto mes de gestación y afectan al 77-90% de las mujeres embarazadas.
Son líneas de piel atrófica, que se producen como resultado de una ruptura de la dermis bajo una epidermis intacta. Al inicio, se aprecian trayectos lineales y zigzagueantes de menos de un centímetro de ancho y varios centímetros de largo, piel eritematosa y ligeramente sobreelevada.
En poco tiempo, se deprimen y adquieren un color rojo-violáceo y, con los años, se ven de un blanco nacarado.
Van a aparecer de forma simétrica, primero, alrededor del ombligo, el resto del abdomen, las caderas y los muslos, y, posteriormente, en las mamas y las axilas.
Se cree que la causa fundamental es la distensión de la piel acompañada de cambios hormonales, pero, además, existe cierta predisposición genética.
¿Por qué salen las varices en el embarazo?
La influencia hormonal y el aumento de la presión venosa van a favorecer la aparición de varices en las piernas, que se acompañan de sensación de pesadez y dolores punzantes en las pantorrillas.
La mayoría de las varices desaparecerán tras el parto, aunque, en algunos casos, puede originarse una insuficiencia venosa crónica.
¿Qué son los acrocordones y dónde aparecen en el embarazo?
Durante la segunda mitad de la gestación, aparecen en gran número unos fibromas blandos del mismo color de la piel de la embarazada, a menudo, pedunculados y con pliegues en su superficie, que se localizan, principalmente, en cuello, axilas y pliegues submamarios.
Generalmente son pequeños, pero pueden alcanzar hasta 5 mm de tamaño. Algunos desaparecen después del puerperio.
¿Cómo debo cuidar la piel en el embarazo?
La mayoría de los cambios fisiológicos de la piel van a desaparecer de forma espontánea, si bien es cierto que algunos pueden mantenerse durante mucho tiempo o incluso llegar a quedarse de forma permanente.
Por lo tanto, lo ideal es tomar ciertas medidas para prevenir su aparición, o, al menos, conseguir que sean lo menos llamativos posible.
El primer consejo es que no debes caer en la tentación de utilizar cualquier producto o tratamiento estético a la ligera. Siempre consulta primero con los profesionales adecuados, ya que, durante el embarazo, hay que extremar las precauciones. Asimismo:
- Utiliza protección solar alta y evita la exposición excesiva al sol.
- Hidrata diariamente la piel.
- Realiza una higiene facial diaria con cosméticos limpiadores específicos para pieles sensibles o intolerantes. Se recomienda la aplicación de un tónico o agua termal por sus propiedades calmantes y antiirritantes. Evita utilizar cosméticos exfoliantes, lociones alcohólicas y tratamientos agresivos.
- Utiliza cosméticos antiestrías dos veces al día, realizando un suave masaje en mamas, abdomen, nalgas y cadera.
- Para prevenir la aparición de varices, es aconsejable que utilices medias de compresión, evita llevar ropa que comprima y usa un calzado cómodo. No olvides los beneficios de las duchas con agua fría desde el tobillo hacia las rodillas, y descansar con los pies ligeramente elevados.
- Evita tratamientos agresivos en el pelo durante el embarazo.
- Utiliza cosméticos capilares de calidad adecuados para el embarazo.
En cuanto a las alteraciones estéticas que sí van a ser más difíciles de revertir a nivel doméstico, lo más importante es no precipitarse. Una vez más, te recomiendo que pidas consejo profesional. Los avances en medicina estética y los tratamientos van mejorando día a día.
De este modo, cuando pase un tiempo prudente tras el puerperio, puedes plantearte si esas alteraciones que han aparecido durante el embarazo realmente necesitan tratarse o no.
Daniel Morillas
Matrón
Vicepresidente de la Federación
de Asociaciones de Matronas de España (FAME)
Bibliografía
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- Guerra Tapia, A. (2002). Embarazo y piel. Cambios fisiológicos y trastornos con repercusión estética. Actas Dermo-Sifiliográficas, 93(2), 77-84.
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