Letargia, la falta de energía en los niños

9 Feb 2023
Letargia: falta de energía en los niños

Aunque la letargia es más habitual en los adultos, es un problema que también pueden sufrir los niños. Esta afección puede deberse a distintos motivos, por lo que su tratamiento vendrá determinado por la causa que origina la letargia.

La letargia consiste en una pérdida completa, y temporal, de la sensibilidad y del movimiento, lo que provoca que las funciones vitales del niño que padece la afección se vean mermadas, pudiendo llegar a dar la sensación de que ha fallecido. Se han producido casos en los que la persona afectada percibe y comprende todo lo que sucede a su alrededor, pero no es capaz de reaccionar. La letargia lúcida hace referencia a la actividad psíquica que se conserva durante la letargia.

(Te interesa: Diccionario de enfermedades comunes en el embarazo, bebés y niños)

Síntomas y causas de la letargia

En los casos más graves de letargia, el niño afectado yace inmóvil y tanto el pulso como la respiración son prácticamente imperceptibles, los miembros quedan sin rigidez y las pupilas están dilatadas, sin reaccionar de forma normal ante la luz.

La letargia es también una sensación prolongada de fatiga y cansancio. El niño en estado letárgico permanece largos periodos de tiempo sin moverse y se acuesta con pereza. La falta de energía puede ser uno de los desencadenantes de esta sensación de letargo, pero también se asocia la letargia con trastornos psicológicos o graves enfermedades.

La anemia provoca la reducción de los glóbulos rojos en la sangre, encargados de transportar el oxígeno a los distintos órganos del cuerpo, lo que puede provocar la letargia. El factor más común de la anemia es una dieta pobre en hierro, normalmente, relacionada con la desnutrición infantil, que provoca la disminución de los niveles de energía. Si el organismo no recibe las dosis diarias de vitaminas, minerales y proteínas que necesita, el niño sufrirá una caída en sus niveles de actividad, pudiendo llegar a entrar en un estado letárgico.

Otro de los causantes de la letargia es la falta de sueño. Si el niño no descansa lo suficiente, puede experimentar una fatiga persistente, así como no ser capaz de concentrarse para realizar las tareas diarias.

(Te interesa: Enfermedades comunes en el bebé)

Tratamiento de la letargia

Cualquier síntoma de letargia puede ser indicio de una enfermedad grave, por lo que es importante acudir al pediatra para que realice las pruebas necesarias para encontrar la causa de esta afección.

El tratamiento dependerá del motivo causante de la letargia. En ocasiones, cuando está causada por un sobresalto fuerte, o un shock, puede que se pase sin necesidad de seguir ningún tratamiento, pero si el motivo es fisiológico, será necesario que el pediatra averigüe la causa de la letargia, para que indique el tratamiento correspondiente.

(Te interesa: Enfermedades infantiles)

Edurne RomoEdurne Romo
Directora Editorial. Periodista especializada en maternidad, infancia y crianza