Un policía adopta al bebé de una embarazada adicta a la heroína

Existen algunas historias dignas de película, como la del agente de policía norteamericano Ryan Holets, que adoptó al bebé de una mujer embarazada adicta a la heroína a la que socorrió. Pero, ¿cómo llegó a realizarse la adopción? Todo empezó cuando un día Ryan, que se encontraba patrullando por las calles de Albuquerque, en Estados Unidos, recibió la llamada de un posible robo en una tienda. El agente se desplazó hasta el lugar de los hechos y, tras realizar unas pesquisas en el interior, salió a la calle. En ese momento, se dio cuenta de que había dos personas inyectándose heroína a plena luz del día; una de ellas, una mujer embarazada.

El policía regañó a la futura mamá

Ryan se acercó a la mujer embarazada que se estaba drogando en plena calle y, sin poder reprimirse, empezó a regañarla. Ella, de nombre Crystal Champ, de 35 años, explicó al agente que estaba embarazada de ocho meses y que era adicta. Ryan le contestó: "Vas a matar a tu bebé. ¿Por qué tienes que hacer esto? Vas a arruinar la vida de tu hijo". Tras estas duras palabras, ella empezó a llorar.

De toda la escena existe un video captado por una cámara que llevaba el agente. En él se ve a Ryan interrogando a Crystal y advirtiéndola del peligro que suponen las drogas para el bebé. En un momento de la conversación, la futura mamá reconoce al policía que espera que alguien adopte a su hijo. Tras escuchar sus palabras, Ryan le mostró una fotografía de su esposa y sus cuatro hijos, incluyendo un bebé de 10 meses, y se ofreció a adoptar a su bebé.

Fotografía del agente de policía Ryan Holets y tres de sus hijos.

Crystal dio a luz a una niña

Crystal Champ se quedó atónita ante las palabras de Ryan. "Se convirtió en un ser humano en lugar de un policía", explicó. La mujer se quedó contemplando al agente, intentando "asegurarse de que su mirada era sincera". Sin embargo, después de haberle hecho la propuesta a Crystal, Ryan se percató de que debía contárselo a su mujer, Rebecca, que se encontraba a unas kilómetros de distancia en una fiesta de despedida para un amigo. Ryan se subió al coche patrulla y condujo hasta la fiesta para dar la noticia a su esposa.

En el pasado, la pareja había tanteado la posibilidad de adoptar en un futuro, pero no hasta que su hijo menor creciera un poco más. Sin embargo, al escuchar a su marido, Rebecca aceptó. El 12 de octubre Crystal Champ dio a luz a una niña. Ryan estuvo presente durante el parto y la familia Holets la puso el nombre de Hope (Esperanza). Unos días más tarde, Champ se despidió de su hija. "Te amo. Adiós", le dijo a la pequeña y, a continuación, se volvió hacía Rebecca y le dijo: "Cuida de ella por mí'".

(Te interesa: Adopción: ¿cómo empezar el proceso?)

¿Qué te parece la historia de esta mamá adicta y el policía que adoptó a su bebé? ¡Comparte tu opinión con otras mamás al final del artículo!