Investigan una posible relación de la nueva hepatitis infantil con los perros
Investigan una posible relación de la nueva hepatitis infantil con los perros
10 May 2022
Científicos han encontrado una posible conexión con la presencia de perros en las familias de la mayoría de los menores afectados por la hepatitis de origen desconocido. Sin embargo, alertan de que este hallazgo no implica causalidad. ¡Actualizamos la información!
La hepatitis infantil aguda de causa desconocida que ha puesto en alerta a la comunidad científica tiene una nueva investigación abierta acerca de su posible causa, que aún está por determinar.
Son ya más de 200 casos en todo el mundo y el origen de este brote de infección hepática, que se inició en el Reino Unido y donde se concentran la mayoría de los casos, todavía es una incógnita, si bien se han dado pasos en la investigación.
Nueva posible hipótesis, que no descarta las otras
La Agencia de Seguridad Sanitaria del Reino Unido (UKHSA) está investigando la relación entre la hepatitis y los perros, después de detectarse que un número elevado de los niños afectados conviven con perros o están expuestos a ellos.
En su informe semanal sobre la incidencia de esta hepatitis, la UKHSA ha concluido a partir de los cuestionarios realizados a familias afectadas, que el 70 % (64 de 92 encuestados) tenían un perro en casa o habían estado expuestos a estos animales.
La UKHSA se encuentra ahora valorando la importancia de esta circunstancia, si bien podría tratarse de una mera coincidencia, ya que un alto porcentaje de las familias británicas tienen perros.
El adenovirus 41 sigue siendo el principal sospechoso
Si bien ha entrado en escena esta nueva posible causa, lo cierto es que, por el momento, el principal sospechoso del origen del brote sigue siendo un tipo de adenovirus, concretamente, el 41. Normalmente, es un adenovirus que no suele dar complicaciones relacionadas con el hígado, pero también podría tratase de una mutación del mismo, que pudiera dar lugar a la infección aguda que acaba en trasplante en uno de cada 10 casos, aproximadamente.
Tampoco se ha descartado completamente la hipótesis de que el SARS-Cov-2, el virus causante de la enfermedad por coronavirus, haya podido influir de alguna manera en el origen del brote, ya sea directa o indirectamente.
Lo que sí se descarta, totalmente al parecer, es la implicación de la vacuna contra el COVID-19, después de investigar también esta vía.
“Le estamos dando prioridad absoluta a esto y a trabajar muy estrechamente con el Centro Europeo para la Prevención y Control de Enfermedades en la gestión y coordinación”, afirmó el director regional de Emergencias, Gerald Rockenschaub.
La propia OMS ha calificado la situación como “un asunto muy urgente”. Sin embargo, en ausencia de datos más concluyentes y de un aumento exponencial de la incidencia, también invita a la cautela por parte de las familias, que siempre deben estar atentos a los posibles síntomas. Una vez más: dolor abdominal agudo, vómitos, diarrea, coloración amarillenta de la piel, orina de color oscuro y heces de color blanquecino.
Llamado a la cautela de los pediatras ante el aumento de la incidencia
Ante la alerta sanitaria sobre el incremento de casos de hepatitis infantil aguda detectado en varios países, la Sociedad de Gastroenterología, Hepatología y Nutrición Pediátrica (SEGHNP), la Sociedad Española de Infectología Pediátrica (SEIP) y la Sociedad Española de Urgencias de Pediatría (SEUP), junto con la Asociación Española de Pediatría (AEP), quieren compartir con los profesionales médicos y la población a nivel mundial las siguientes consideraciones:
Nuestras sociedades científicas están siguiendo de manera exhaustiva las novedades que sobre el aumento de casos de hepatitis agudas en niños (algunas de ellas sin filiar, algunas de ellas graves) se han comunicado en las últimas semanas. Al día de hoy no se ha identificado una causa única que justifique el aumento de casos que algunos hospitales han experimentado.
Hay que recordar que la alteración de las pruebas de función hepática es un fenómeno relativamente frecuente en una serie de enfermedades comunes en la infancia como son los procesos infecciosos, así como que, en la mayoría de estos casos, la afectación hepática es leve y autolimitada, y que la aparición de casos de hepatitis aguda grave y complicada es un fenómeno habitualmente poco frecuente y no siempre relacionado con agentes infecciosos más o menos conocidos (en ocasiones se producen en el contexto de intoxicaciones, interacciones medicamentosas o enfermedades crónicas hepáticas ya existentes).
Las SEGHNP, la SEIP y la SEUP, conjuntamente con la Asociación Española de Pediatría (AEP), recomendamos que los profesionales implicados en la Atención Pediátrica extremen su vigilancia ante la posible aparición de nuevos casos de hepatitis graves, de cara a poder establecer un diagnóstico y tratamiento adecuados, así como registrar y comunicar los mismos.
Por último, queremos transmitir cautela y serenidad a la población y a la opinión pública mundial, pues no tenemos, al día de hoy, una hipótesis fiable que haga pensar en un crecimiento importante del número de nuevos casos.
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¿Tu nivel de alerta ante el brote de hepatitis aguda infantil de origen desconocido ha bajado en los últimos días? ¿Esta posible relación con los perros te preocupa? ¡Déjanos tu cometario!
