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Un padre se pinta las uñas como muestra de soporte a su hijo
El papá lamenta, en una publicación que se hizo viral en Facebook, que los compañeros de clase de su hijo de cinco años lo llamen "mariquita" porque le gusta pintarse las uñas. ¡Te lo explicamos!
Jesús Fernando Ruiz Moneo, un papá vasco, compartió el pasado lunes una carta en su perfil de Facebook junto a una foto en la que aparece él con su hijo de cinco años, Luken, ambos con las uñas pintadas. "A mi hijo le encanta pintarse las uñas y yo lo apoyo dejando que me las pinte a mí". Así empieza la carta de este papá, que ha sido compartida cerca de 39,000 veces en la red social, convirtiéndose en una publicación que se ha hecho viral.
Todo empezó porque el hijo de Jesús Fernando, Luken, estaba triste porque sus compañeros de clase se burlaban con él porque le gustaba pintarse las uñas. Ante la reacción de sus compañeros, llegó un momento en que el niño empezó a pedir a sus padres que le despintaran las uñas antes de ir a la escuela. Lo explica su padre: "Lo hago (referente a la foto de ambos con las uñas pintadas bien coloridas) debido a que últimamente pide (su hijo) que se las limpiemos antes de ir a la escuela porque algunos de sus compañeros de clase de cinco años se burlan y comentan que es una niña o un mariquita, y él se pone triste".
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El papá pide acabar con las ideas sexistas
El papá de Luken explica, a lo largo de la carta, que en su opinión el problema no es el del pequeño y pide a los padres que piensen en el tipo de ideas que están implantando en niños de tan temprana edad, que se encuentran en pleno desarrollo en relación con la sociedad que les rodea.
La carta de Jesús Fernando sigue así: "Intentamos convencerlo de que el problema lo tiene enfrentar, pero es duro verlo así. Aunque lo que más me entristece a mí es el estado del cerebro de esos niños que sin duda están siendo encauzados hacia unas ideas retrógradas, anticuadas y sexistas".
Por todos estos motivos el padre del pequeño Luken pide a los que también tienen hijos como él que "piensen en el tipo de ideas que están implantando en esos cerebritos en pleno desarrollo y qué cicatrices les van a provocar. Además de lo que va a costar borrarlas, si es que es posible", concluye.
El post del papá Jesus Fernando Ruiz Moneo con las uñas pintadas junto a su hijo de cinco años, Luken.