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El pasado 4 de septiembre, la reconocida red de clínicas Reina Madre inauguró su nueva sucursal en la plaza comercial Gran Sur, justo a un costado del Cinemex. Este espacio, diseñado para brindar consultas ginecológicas, de embarazo y pediatría, se perfila como una de las opciones más completas para quienes buscan atención médica de calidad sin los costos de un hospital privado tradicional.
Con 14 consultorios totalmente equipados, tres áreas exclusivas para pediatría y un ambiente cómodo y cálido, la clínica promete convertirse en un punto de referencia para las familias del sur de la Ciudad de México.
La propuesta de Reina Madre se centra en un modelo de atención integral, donde la mamá elige al ginecólogo que la acompañará desde el embarazo hasta el momento del parto. Este mismo médico se encarga de su seguimiento, lo que brinda confianza y cercanía durante todo el proceso.
Además, el equipo médico cuenta con especialistas en neonatología y pediatría, permitiendo una transición fluida para el cuidado del recién nacido. La madre puede decidir si continúa con el neonatólogo asignado o si prefiere otro pediatra de la red.
La clínica ofrece paquetes de atención prenatal y de parto con precios pensados para diferentes presupuestos. Desde controles de embarazo hasta asesorías de lactancia, cada plan busca que la madre reciba no solo asistencia médica, sino también educación y orientación para una maternidad informada.
Dato clave: si la paciente no se siente cómoda con el médico asignado, puede solicitar cambio de especialista sin costo extra, garantizando una experiencia segura y satisfactoria.
Uno de los aspectos que distingue a Reina Madre es su flexibilidad para que las pacientes elijan a su equipo médico. Al iniciar el control prenatal, se asigna un ginecoobstetra que acompañará a la madre durante todo el embarazo. Si no existe afinidad, la paciente puede cambiar de especialista gratuitamente, las veces que sea necesario, hasta encontrar al médico con quien se sienta más cómoda.
Cuando la fecha de parto se aproxima, la mamá recibe información detallada sobre los hospitales con convenio, con la libertad de seleccionar el que más confianza le inspire. Todos estos centros cumplen con estándares de seguridad y calidad, y el mismo ginecólogo que llevó el seguimiento será quien atienda el parto, sin sorpresas ni cambios de último momento.
Tras el nacimiento, la clínica asigna un especialista en neonatología para la primera revisión del bebé. Posteriormente, los padres pueden decidir si continúan con este médico para el seguimiento pediátrico o si prefieren que se les asigne un pediatra dentro de la misma red. Este sistema garantiza continuidad y evita que las familias tengan que buscar médicos por su cuenta.
Este enfoque permite que tanto madres como padres se sientan respaldados en cada etapa: desde la primera consulta, el parto y los primeros meses de vida del bebé, con la certeza de contar siempre con un equipo de confianza.
La nueva sucursal de Gran Sur no solo se distingue por su tecnología, sino también por su ambiente. Salas de espera decoradas con calidez, consejería personalizada y un equipo capacitado para resolver dudas administrativas y médicas hacen que la visita sea menos estresante que en un hospital convencional.
Incluso, las familias reciben orientación para elegir el hospital donde nacerá su bebé, gracias a convenios con hospitales aliados que aseguran estándares de calidad.
La llegada de Reina Madre a Gran Sur representa una oportunidad única para madres y padres que buscan atención médica de calidad, calidez humana y precios accesibles. Desde la elección del ginecólogo hasta la asignación de un pediatra, el servicio está diseñado para que cada familia se sienta acompañada y segura en una de las etapas más importantes de su vida.
Si vives en la Ciudad de México y buscas un lugar donde tu salud y la de tu bebé sean prioridad, esta nueva clínica es una alternativa que combina tecnología, experiencia y trato personalizado.
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