¿Qué factores influyen en la altura del niño?

A los padres en general les preocupa mucho la altura que tendrá su hijo cuando sea mayor.

Sin embargo, es importante recordar que lo más relevante es valorar que el crecimiento del pequeño sea equilibrado. Es decir, la altura del niño ha de aumentar en la misma medida que lo hace el peso para que el cuerpo adquiera proporciones armónicas.

Qué altura tendrá el bebé cuando sea mayor

Los especialistas del crecimiento del bebé han elaborado una fórmula que permite prever, con un margen de fiabilidad muy elevado, la altura que puede alcanzar un bebé cuando sea mayor.

Hay que tener en cuenta que, como norma general, los niños suelen ser más altos que las niñas, aunque también influye mucho la herencia genética.

Para las niñas:

Se suman las alturas del padre y de la madre, expresadas en centímetros, se resta 13 y se divide por 2. Al resultado obtenido, se resta y se suma 7. Ejemplo: papá mide 180 centímetros y mamá, 155. La fórmula es la siguiente:
180+155=335-13=322
322/2=161
Ahora, a 161 se suma y se resta 7: se obtiene 168 y 154.
La niña, de adulta, podrá tener una estatura comprendida entre 154 y 168 centímetros.

Para los niños:

Se suman las alturas del padre y de la madre, expresadas en centímetros, se suma 13 y se divide por 2. Al resultado obtenido, se resta y se suma 7.
Ejemplo: papá mide 178 centímetros y mamá, 162. La fórmula es la siguiente:
179+162=341; 341+13=354
354/2=177
177+7=184; 177-7=170
El niño, de adulto, podrá tener una estatura comprendida entre 170 y 184 centímetros.

¿Crecen de forma diferente los niños y las niñas?

Los niños y las niñas se desarrollan de forma diferente ya desde su nacimiento. Al nacer, ya tienen medidas diferentes: los niños pesan algunos gramos más que las niñas: unos 3.200-3.500, frente a unos 3.000-3.300 de las niñas. Igual sucede con la altura al nacer. Normalmente, las niñas miden uno o dos centímetros menos que los niños. En cuanto  a la diferencia craneal, las diferencias también son visibles. Los niños tienen la cabeza un poco más voluminosa que las niñas; suelen tenerla uno o dos centímetros más grande que las niñas.

Factores que determinan la altura de los niños

Existen muchos factores que determinan lo alto que será el bebé de mayor: herencia, nutrición, condiciones sanitarias, ejercicio, horas de sueño, etc.

Sin embargo, cuando se habla sobre crecimiento del bebé y altura, surgen muchas dudas. De hecho, existen algunas creencias al respecto que son falsas. Y también, otros factores que verdaderamente influyen en la altura del niño. Veamos, a continuación, qué hay de cierto y de falso en cada caso. 

El crecimiento del bebé en la pancita depende de la madre
Ciertamente, el 52% del crecimiento fetal depende de la madre, mientras que solamente el 18% depende del bebé. Existen factores genéticos que pueden determinar lo alto que será el bebé, pero lo más determinante en el vientre materno son los cuidados de la futura mamá a lo largo del embarazo. El feto debe encontrarse en un ambiente acogedor: un útero que le garantice un buen desarrollo y una placenta que le proporcione una excelente nutrición. Estos factores influyen en la longitud del niño y también en su salud, especialmente durante los dos primeros años de vida. 

Cuando el bebé crece más es durante el primer año vida
El primer año de vida se considera la etapa de crecimiento acelerado, ya que, al cumplir los 12 meses, en general, el niño ha crecido un 50%, incluso más, de lo que midió al nacer. Así, un niño varón cuya longitud fue de 50 centímetros al nacer, al año de vida, puede estar en los 76 centímetros de longitud. No obstante, aún le queda mucho por crecer.

Los niños son más altos que las niñas
En general, los niños suelen ser más altos que las niñas. Ya al nacer, ellos tienen un promedio de medio centímetro más de estatura que ellas. Sin embargo, el crecimiento de ambos sexos es muy similar a lo largo de la infancia. Lo que a veces determina que ellos sean más altos que ellas es el hecho de que, durante la adolescencia, los chicos crecen durante un período más prolongado de tiempo. Mientras las chicas crecen hasta los 15 o 18 años, ellos lo hacen hasta los 18 o 21.

Los niños crecen más en verano
De enero a julio los niños crecen más en altura y peso y, en cambio, de agosto a diciembre sucede lo contrario. Ello se debe a que los días se alargan de enero a julio y se acortan de agosto a diciembre, y la luz solar influye en el crecimiento infantil. Para precisar aún más, se puede decir que de enero a marzo es cuando los niños crecen más, y también de mayo a julio. Sin embargo, depende de cada caso.

Existe un momento adecuado durante el año para medir al niño
Es falso, no hay un momento más adecuado que otro. Debes tener en cuenta que cada niño crece a su propio ritmo y que no es bueno hacer comparaciones entre coetáneos. En particular, durante el mes de abril hay una mayor diversidad de estaturas entre los niños y, por lo tanto, las comparaciones pueden ser particularmente engañosas. 

 Las enfermedades hacen crecer 
Todo lo contrario. Cuando el niño cae enfermo, como consecuencia de una de las típicas enfermedades tan frecuentes de diciembre a marzo (otitis, gripa, diarrea, etc), se produce una desaceleración temporal del crecimiento. Si la enfermedad que el pequeño sufre es realmente grave o prolongada se puede llegar a producir una verdadera detención. Sin embargo, cuando el niño deja atrás la enfermedad, recupera los centímetros "perdidos" durante el período de convalecencia y sigue creciendo sin problemas.

La estatura depende de los padres
Contrariamente a lo que se suele pensar, la longitud al nacer, así como el peso, solamente viene determinada en una pequeña parte por los factores genéticos. Puede ocurrir que los dos miembros de la pareja sean bajitos y que el niño sea alto debido, por ejemplo, a que vivió sus primeros nueve meses en un cómodo entorno dentro del útero materno. Posteriormente, durante los dos primeros años de vida, el niño pierde gradualmente esta ventaja porque es entonces cuando empieza a equilibrarse con la altura media de los padres. A los tres años, se puede calcular con relativa certeza cuál será la altura que tendrá el pequeño de adulto.

La alimentación le ayuda a crecer
Seguir una dieta variada, rica en vitaminas y minerales, puede acelerar la velocidad de crecimiento del niño. A veces, este fenómeno se asocia con una adquisición más rápida de peso. No existe ninguna enfermedad grave que pueda afectar tanto el crecimiento como para evitar que el cuerpo llegue a su potencial de estatura establecido.