Una pareja de 'youtubers' anula la adopción de un bebé al saber que no pueden mostrarlo en redes sociales

La pareja de 'youtubers' estadounidenses Nikki y Dan Philippi están dando mucho de que hablar estos días por el hecho de haber optado por sacrificar a su perro después de que mordiera a su hijo. No es la primera vez que la pareja enciende las redes sociales compartiendo decisiones de su día a día.

Muchos de sus seguidores se han enterado de que hace un par de años, cuando tenían en mente adoptar a un bebé, rechazaron la adopción de un niño tailandés cuando se enteraron de que se les exigía que no compartieran fotos u otra información del niño en las redes sociales.

En el video, publicado en 2018 y que ahora se ha hecho viral, Nikki y Dan explicaban las dificultades que estaban teniendo para adoptar a nivel internacional un bebé. Lo acababan de intentar en Tailandia, pero no les había funcionado, según relatan en el video. Cuando el proceso de adopción estaba a punto de finalizar, se encontraron con una norma que no les gustó: no podían mostrar al bebé en redes sociales.

'Ya no vamos a adoptar desde Tailandia'

La decisión de parar el proceso de adopción lo explicó Nikki en el video: "Ya no vamos a adoptar desde Tailandia y el motivo es la 'política de redes sociales' de la empresa con la que adoptamos. Nuestros seguidores ya nos habían advertido que todo lo que compartimos podría afectar al proceso de adopción, pero siempre hemos pensado que tenemos 'sentido común' y hemos hecho unos cambios para que no afecte".

La organización que gestionaba la adopción del bebé exigía que, para que el pequeño formara parte de la familia, debían cumplir con una cláusula que prohibía compartir algún tipo de imagen, video o contenido del niño en redes sociales durante todo un año. Esta cláusula no gustó a la pareja de 'youtubers', por lo que decidieron rechazar la adopción.

El director de la agencia de adopción negoció una 'excepción' para ellos

"Yo pensaba que eso de 'no compartir' iba a ser antes de que pasara a ser un miembro de nuestra familia, por cuestiones de privacidad, pero no; cuando pregunté, me confirmaron que después de recoger a nuestro hijo, no se nos permitía hablar de él ni compartir imágenes, fotografías, videos… Durante un año. No lo creíamos", explicó Nikki.

Así pues, la pareja optó por no adoptar al bebé, a pesar de que el director de la agencia de adopción intentó negociar con Tailandia para permitir una excepción para la pareja, que obtuvo una negativa rotunda: no hay excepciones, por mucho que tengas miles de seguidores en las redes.

"No es lo que queríamos. Llevo compartiendo mi vida durante siete años y medio, debería ser decisión nuestra si queremos compartir algo o no. Queríamos tener las riendas y controlar qué hacer o no con nuestro tiempo en las redes", se defendía Nikki.

Intentaron adoptar a otros países, sin éxito

Fallido este proceso de adopción, la pareja anunció que lo intentaría en otros países, como Corea del Sur. Sin embargo, meses después compartieron un video en el que explicaban que adoptar a nivel internacional no les sería posible a causa de su presencia constante en las redes sociales.

También trataron de convertirse en padres de un niño abandonado a nivel local, pero sin éxito, porque consideraban el proceso como un atajo para la adopción. Finalmente, Nikki quedó embarazada y así hicieron realidad su deseo de convertirse en padres. Su hijo, Logan, nació en junio de 2020. No hace falta decir que la pareja ha documentado cada minuto desde su nacimiento.

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¿Qué opinas sobre la decisión tomada por esta pareja? ¿Piensas que las redes sociales tienen demasiado poder, tanto que incluso pueden hacer cambiar de idea a una pareja que está a punto de adoptar? ¡Déjanos tu comentario!