Escuela priva a un niño de 4 años de ir a clases por conducta agresiva

13 Dec 2023
Niño de 4 años privado de ir al cole

Durante el primer curso, el niño no presentó ningún problema, pero según la dirección educativa, al año siguiente se dieron "conductas agresivas que ponen en riesgo la integridad del propio alumno, de sus compañeros de clase y de los profesores que lo atienden". 

Una escuela situada en Alicante, España, privó a un niño de cuatro años de su derecho a asistir al centro educativo por "conducta agresiva" durante un plazo de tiempo indeterminado. Ante tal situación, el Tribunal Constitucional de aquel mugar decidió desestimar el recurso de amparo presentado por los padres del niño contra la resolución de la directora de la escuela.

El pequeño ingresó a los tres años de edad a dicha escuela. Durante el primer curso (2015/2016), no presentó ningún problema de conducta, pero durante el siguiente curso empezó a mostrar una serie de comportamientos que la escuela califica de "berriches" y "conductas agresivas que ponen en riesgo la integridad del propio alumno, de sus compañeros de clase y de los profesores que lo atienden".

'Daba patadas, escupía, se quitaba los zapatos y los calcetines'

Ante tal comportamiento del niño, la escuela decidió que permaneciera en su casa, ya que consideró que tenía "cierta conducta agresiva" que indicaba "problemas de salud mental". 

La escuela pretendía esperar a que el niño fuera diagnosticado y tratado para poder proceder, de forma progresiva, a su reintegración o determinar otras posibles modalidades de escolarización. Además, puso a disposición de la familia los recursos pedagógicos necesarios para que pudiera continuar con su educación en el ámbito familiar.

Asimismo, la directora del lugar presentó un informe diciendo que el niño "daba patadas, escupía, se quitaba los zapatos y los calcetines, lanzándolos al aire", episodios que solían durar "más de 30 minutos, a cualquier hora del día" y que cada vez se producían "con más frecuencia".

También describió las conductas del pequeño como de "berriches, angustia, agresión a los compañeros, autolesión, daños a recursos del aula"; y apuntaba que el alumno tenía "antecedentes de esquizofrenia del padre y tío".

Según la directora, se tomaron numerosas medidas, pero no consiguieron resultados positivos, por lo que era necesario contar con un diagnóstico facultativo sobre la causa que generaba la agresividad de la conducta del niño.

Recurso desestimado

Ante esta situación, los padres presentaron en 2017 una denuncia a las autoridades correspondientes, alegando que se impedía al menor continuar en la escuela si no aportaban un diagnóstico médico sobre su salud mental.

Los padres, así pues, solicitaron que el niño fuera reintegrado a la escuela y que se abriese un expediente disciplinario a los responsables de la escuela. 

El recurso de amparo presentado por los padres fue desestimado. Ésta fue la sentencia del magistrado: "El niño recurrente es titular de derechos fundamentales en la misma extensión y calidad que el resto de los ciudadanos. Esos derechos no pueden verse intermediados, flexibilizados ni condicionados por la visión proyectada desde concepciones que subestiman la condición de plena ciudadanía de los niño por el hecho de que sea de muy corta edad".

............

¿Qué opinas sobre este caso? ¿Piensas que si la conducta de un niño es agresiva, como en este caso, la escuela puede privarlo de asistir a clases? ¿Has vivido un caso parecido con tu peque o los compañeros de su clase? ¡Déjanos tu comentario!

REDACTORA MI BEBÉ Y YO. Coordinadora de la sección Mujer Hoy, y experta en embarazo, bebés y niños.

Te puede interesar…

Y tú ¿Qué opinas?
Escoge un avatar
avatar avatar avatar avatar avatar avatar avatar avatar avatar avatar avatar avatar avatar avatar avatar avatar avatar avatar avatar avatar avatar avatar avatar avatar avatar avatar avatar avatar avatar avatar avatar avatar avatar avatar avatar avatar avatar
Enviar Comentario
Comentarios (0)