¿Qué es y cuál es el desarrollo del cuerpo lúteo?

La fase lútea, que dura 10 días como mínimo y 16 días como máximo, empieza después de la ovulación y se origina en el ovario. El desarrollo de esta fase será diferente si el óvulo ha sido fecundado o no. Es importante saber cómo se desarrollan los óvulos en el cuerpo lúteo tanto en un caso como en el otro. Ambos escenarios serán tratados a continuación.

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¿Qué es el cuerpo lúteo?

También se le conoce como cuerpo amarillo y es una estructura glandular, de carácter cíclico y temporal, que se desarrolla dentro del ovario tras la ovulación o tras el desprendimiento del óvulo, que es el momento en el que se rompe un folículo para liberar el óvulo hacia el exterior.

En este folículo, se desarrolla una pequeña glándula con células de pigmento amarillo (luteína) que segregan progesterona. Este procedimiento hace posible que se constituya el cuerpo lúteo.

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¿Qué sucede en caso de fecundación del óvulo?

Cuando hay fecundación en el óvulo liberado, el cuerpo lúteo empieza a crecer y a secretar grandes cantidades de progesterona en los primeros meses de embarazo. Esto hace posible que la mucosa uterina se desarrolle lo suficiente y acoja la nidación, y se creen, en consecuencia, las condiciones adecuadas para que crezca el huevo y se alimente al embrión. La placenta segregará, a partir de entonces, la hormona del embarazo, conocida como la gonadotropina coriónica humana, la cual se detecta en los tests de embarazo. Esta hormona asegura que el cuerpo lúteo continúe produciendo cantidades adecuadas de progesterona para que el embrión se alimente hasta que la placenta sea capaz de hacerlo por sí misma.

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¿Qué sucede en caso de no fecundación del óvulo?

En este caso, el cuerpo lúteo permanece dos semanas aproximadamente y luego acaba descomponiéndose, y, en paralelo, se produce una disminución de la secreción de la progesterona, generando así el sangrado menstrual y marcando un nuevo ciclo en el que un nuevo cuerpo lúteo se formará. Durante este proceso de contracción del folículo vacío, y en el que se continúa produciendo progesterona y estrógenos, las mujeres suelen sentir los síntomas premenstruales, como la hinchazón, la irritabilidad o el dolor en los senos. 

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