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¡Indignante! Una niña de 6 años consume cocaína y alcohol en una fiesta organizada por su madre
La pequeña acudió al día siguiente al campamento de verano mostrando signos extraños que alertaron a los responsables del lugar. Al parecer, la niña habría consumido de forma voluntaria. Te explicamos estos terribles hechos.
No nos entra en la cabeza cómo una niña de seis años de Mallorca, isla española, pudo llegar a consumir sustancias tóxicas como cocaína y alcohol en su propia casa, con la presencia de su madre, durante una fiesta organizada por la propia madre.
La menor se encuentra en estos momentos tutelada en un centro de protección de menores, puesto que la madre fue detenida, como no podría ser de otra manera, y ahora se enfrenta a un delito de lesiones.
Ahora, el asunto está en manos de la policía, que se encuentra investigando si el lamentable suceso fue un hecho aislado, o si se repetía con cierta frecuencia.
Cómo llega una niña a consumir cocaína por voluntad propia
Los responsables del campamento de verano al que acudió la pequeña al día siguiente de la fiesta notaron algo extraño en el comportamiento y el estado de la niña, de manera que la trasladaron a un hospital, donde un análisis detectó la presencia de sustancias tóxicas como cocaína y alcohol. ¿Cómo puede ser?
Quizás, uno de los aspectos del caso que más nos ponen los pelos de punta es que la menor no solo tuviese acceso a estas sustancias en su propia casa sin que su progenitora no hiciera nada para impedirlo, sino que, además, consumiera por voluntad propia y no de forma accidental, lo que nos puede dar una idea de que, tal vez, no era la primera vez que presenciaba escenas nada adecuadas para una niña de su edad. No obstante, solo se trata de especulaciones, ya que los hechos se están investigando en estos momentos.
No podemos entender qué pasa por la mente de una madre que permite que su hija de seis años entre en contacto con sustancias que pueden ser fatales para su salud. La pequeña debió haber sido protegida de este tipo de peligro y, en este caso, la profesionalidad y la buena voluntad de los cuidadores del campamento lograron alertar a las autoridades y poner remedio a este caso, antes de que sucedieran más cosas.
Es verdad que un centro de protección de menores no es el mejor hogar para una niña tan pequeña, pero por el momento, como mínimo, estará a salvo de peligros tan evidentes.
Esperamos de todo corazón que el caso se resuelva cuanto antes y que se pueda ofrecer la mejor solución para que la pequeña tenga una vida normal, la que corresponde a una niña de seis años.
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¿Qué opinas de este caso? ¿Crees que se podría haber hecho más para evitar que la niña consumiera drogas? ¡Déjanos tu comentario!