Agosto 2024 Nº 1

Sueño de calidad para niños.
El secreto para que crezcan sanos y felices

“¡A dormir!” Seguro has escuchado esta frase miles de veces, pero, ¿sabías que el sueño es mucho más que un simple descanso para tu hija/o? Dormir bien es fundamental para su desarrollo físico, mental y emocional.

¿Por qué es tan importante el sueño para los niños?

Durante el sueño, el cuerpo de tu hijo libera hormonas de crecimiento que son esenciales para su desarrollo físico. ¡Así es como se hacen más altos y fuertes!

Mientras duermen, los niños procesan la información que han aprendido durante el día y la almacenan en su memoria. ¡Es como si su cerebro hiciera un repaso de todo lo que han vivido!

Un buen descanso les da la energía que necesitan para jugar, aprender y explorar el mundo. ¡Sin suficiente sueño, pueden estar irritables, cansados y distraídos!

Dormir bien fortalece las defensas de tu hijo, ayudándolo a combatir enfermedades y mantenerse sano.

El sueño adecuado ayuda a regular las emociones de los niños, permitiéndoles manejar mejor el estrés y la ansiedad.

¿Cuánto deben dormir los niños?

La cantidad de sueño que necesita un niño varía según su edad:

  • 3-5 años: 10-13 horas
  • 6-13 años: 9-11 horas

Consejos para fomentar un sueño de calidad:

  • Establece un horario regular para dormir y despertar, incluso los fines de semana.
  • Crea un ambiente tranquilo y oscuro en la habitación de tu hijo. Evita las pantallas (televisión, celular, tablet) al menos una hora antes de dormir.
  • Ofrece una cena ligera y saludable dos horas antes de acostarse.
  • Un baño tibio previo a la hora de dormir puede ayudar a tu niño a relajarse y conciliar el sueño más fácilmente.
  • Leer un cuento o cantar una canción de cuna puede ser un ritual relajante antes de dormir.

¿Qué hacer si mi hijo tiene problemas para dormir?

Si tu hijo tiene dificultades para conciliar el sueño o se despierta con frecuencia durante la noche, consulta a su pediatra. Podría haber una causa médica subyacente que requiera tratamiento.

Un sueño reparador no solo les da energía, sino que también es esencial para su crecimiento, aprendizaje y bienestar emocional. Asegúrate de crear una rutina de sueño saludable para que crezcan fuertes y felices.

Los mejores destinos para viajar
con niños de 5 años en México

Elige el destino ideal

Los niños de 5 años pueden disfrutar de actividades acuáticas más aventureras, como buceo con snorkel, kayak o paddle surf. Considera destinos como Cozumel, Akumal o Los Cabos. 

Explorar la naturaleza, hacer senderismo, observar aves o acampar son experiencias enriquecedoras para los niños. El Parque Nacional Grutas de Cacahuamilpa, el Parque Nacional Iztaccíhuatl-Popocatépetl o el Parque Nacional Lagunas de Montebello son algunas opciones maravillosas. 

Muchas ciudades en México cuentan con museos, parques temáticos y actividades diseñadas especialmente para niños. La Ciudad de México, Guadalajara o Monterrey ofrecen una amplia variedad de opciones para toda la familia.

Planifica actividades divertidas

Explora castillos, pirámides o antiguas ciudades mayas. Los niños de 5 años pueden aprender sobre la historia y la cultura de México de una manera divertida e interactiva. Muchos destinos ofrecen talleres de cocina, manualidades, pintura o música para niños. 

Consulta la cartelera de eventos de tu destino para encontrar festivales de música, danza o teatro que puedan ser interesantes para tu hija/o.

Prepara el viaje con anticipación

Busca hoteles u hospedajes que ofrezcan servicios para familias, como habitaciones comunicadas, áreas de juego o actividades infantiles. 

Lleva ropa cómoda y adecuada para el clima: protector solar, repelente de insectos, botiquín de primeros auxilios y los medicamentos que tu hijo necesite. 

Prepara una bolsa con libros, juegos, juguetes y actividades para mantenerlo entretenido durante los traslados.

Involucra a tu hijo en la planificación

Pregunta a tu hijo qué tipo de actividades le gustaría hacer y qué lugares le gustaría visitar. Permítele que participe en la elección de algunos aspectos del viaje, como el alojamiento, las actividades o los restaurantes. Habla con él sobre los lugares que visitarán y las actividades que realizarán para que se sienta emocionado y preparado.

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Consejos para planificar un viaje en familia

Aprende sobre la planificación de rutas, mantenimiento del coche, seguridad infantil y entretenimiento para los más pequeños. ¡Asegura un viaje tranquilo y divertido para todos!

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El apetito del niño en verano

En verano, es común que los niños pierdan el apetito debido a que sus necesidades energéticas cambian con el aumento de la temperatura. El calor hace que sus cuerpos quemen menos energía para mantener una temperatura corporal constante, lo que reduce la necesidad de calorías. Como resultado, es normal que los niños coman menos y con menor entusiasmo. Para los padres, esto puede ser preocupante, pero es importante entender que este cambio es natural y temporal.

  • Menor consumo de calorías: El calor reduce la necesidad de calorías en los niños, afectando su apetito. Es normal que coman menos y no hay que forzarlos. Hay que respetar sus ritmos.
  • Alternativas para el desayuno: En verano, el yogur es una buena alternativa a la leche por su frescura. Los licuados de fruta también son recomendables. El calcio se encuentra en otros alimentos como el queso fresco, verduras y legumbres.
  • Helado como merienda: El helado puede ser una opción para merendar, pero no debe sustituir las comidas principales. Los helados que contienen leche son los mejores sustitutos del yogur.
  • Plato único: Un plato único equilibrado es ideal para los niños en verano. Opciones como la pizza casera, el arroz con chícharos y las ensaladas con pasta son recomendables.
  • Minerales y sudor: Si no le gusta la fruta ni la verdura, el agua mineral, la carne, el queso, el pescado y los huevos pueden ayudar a recuperar las sales minerales perdidas.
  • Bebidas recomendadas: La mejor bebida para los niños es el agua. Evita las bebidas con gas. Los jugos de fruta son buenos si son 100% fruta y no contienen azúcares añadidos, pero no sustituyen al agua.
Recuerda que es normal que coman menos debido al calor. ¡Respetemos sus ritmos y ofrezcamos opciones saludables y refrescantes!

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