Ya estás en la SEMANA 38
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BEBÉ
En el intestino del pequeño se está acumulando mucho meconio (las primeras heces), constituido por células muertas, lanugo y cabello, y que ingiere junto con el líquido amniótico. El meconio se expulsará en las primeras horas de vida.
MAMÁ
Puedes empezar a notar “calambres” desde la vagina hacia las piernas. Esta sensación la provoca la cabeza del bebé, que presiona sobre las terminaciones nerviosas de la pelvis.
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XPARTOX
Aliviar el dolor sin fármacos
¿Sabías que existen técnicas naturales a las que puedes recurrir para controlar el dolor durante la dilatación y el parto, en caso de que desees vivir un nacimiento no medicalizado?
El control del dolor a través de técnicas no farmacológicas representa un aspecto clave en la preparación de una futura mamá de cara al parto. Además de las cuestiones organizativas a la hora de administrar la anestesia epidural, hay que tener en cuenta que la vía farmacológica representa una forma de medicalización del nacimiento, lo que choca claramente con las expectativas de las mamás que desean controlar la naturalidad de este acontecimiento. Existen algunas técnicas o terapias específicas a las que las mamás que quieren dar a luz de forma natural pueden recurrir para controlar la ansiedad, el estrés y el dolor de la dilatación.
DILATACIÓN Y PARTO EN EL AGUA
Cada vez son más las futuras mamás que se interesan por la posibilidad de relajarse con un baño caliente o sumergirse en el agua durante la dilatación.
Puntos fuertes
> El agua caliente atenúa el dolor de las contracciones y ayuda a relajar los músculos del suelo pélvico, favoreciendo el descenso del niño a través del canal del parto.
Puntos débiles
> No todos los hospitales disponen de bañeras específicas o de baños privados con regadera.
> En los centros hospitalarios que ofrecen esta posibilidad, el número de bañeras disponibles suele ser reducido y no se garantiza su disponibilidad.
> Para dar a luz en el agua, se requiere la asistencia de personal cualificado, y todavía hay pocos centros que lo permiten.
> El agua caliente atenúa el dolor de las contracciones, pero no lo elimina.
> Solo se puede dar a luz en el agua en ausencia de complicaciones que requieran de la intervención médica. La dilatación y el parto en el agua son incompatibles con la administración de la anestesia epidural.
TRAINING AUTÓGENO
Es una técnica originaria de Rusia, enseñada durante años en los cursos de preparación al parto para reducir el estrés y controlar el dolor. Consiste en visualizar todos los músculos del cuerpo relajando, uno por uno, los contraídos por la tensión, ayudándose con la respiración lenta y profunda.
Puntos fuertes
> Puede acortar la fase de expulsión del parto porque favorece la relajación muscular.
> Una vez aprendido, se puede aplicar para controlar la ansiedad y el estrés en diferentes circunstancias de la vida. No requiere ningún material ni la presencia de un monitor.
Puntos débiles
> No anula el dolor, sino que suaviza el aspecto psicológico.
> Para dominar esta técnica, es necesario ejercitarse mucho.
HIPNOSIS
El estado de trance hipnótico es un estado a medio camino entre el sueño y la vigilia, en el que la conciencia de la persona está presente, pero el componente emocional prevalece sobre el racional; asimismo, la percepción de los estímulos externos queda atenuada. La hipnosis es inducida por el psicoterapeuta, que habla con una voz monótona y calmada. Se pueden aprender técnicas de autohipnosis.
Puntos fuertes
> Atenúa el dolor, ayuda a controlar la ansiedad y los pensamientos negativos y puede abreviar la fase de expulsión, favoreciendo la relajación muscular.
> No altera la conciencia de la futura mamá, que permanece despierta y consciente durante el parto.
Puntos débiles
> No elimina completamente el dolor de las contracciones.
> El 10-15% de las personas no pueden practicar la hipnosis ni la autohipnosis.
> El empleo de esta técnica puede fallar debido a elementos de trastorno ambiental, como un clima demasiado tenso en la sala de partos.
ACUPUNTURA
En los últimos años, el recurso a esta técnica durante la dilatación y el parto ha ido en aumento. Las agujas estériles, aplicadas por un acupuntor en puntos específicos del cuerpo, estimulan la producción de endorfinas y, por lo tanto, ayudan a controlar la sensación dolorosa de la contracción.
Puntos fuertes
> Su acción analgésica ha sido sobradamente demostrada.
> La relajación de los músculos permite acelerar el descenso del niño por el canal del parto.
> No tiene contraindicaciones.
Puntos débiles
> Muy pocos hospitales ofrecen la asistencia de un especialista en acupuntura ni la posibilidad de venir acompañada por uno propio.
> La presencia de las agujas reduce la libertad de movimientos de la mujer durante la dilatación.
> El efecto que se consigue es analgésico y no anestésico: el dolor no se elimina, sino que disminuye.
HIDROPUNTURA
Se trata de una terapia relacionada con la acupuntura: consiste en poner inyecciones subcutáneas indoloras de solución fisiológica en los puntos indicados por la acupuntura.
Puntos fuertes
> Los mismos que la acupuntura. Además, la duración del efecto analgésico es mayor y, puesto que no requiere el empleo de agujas fijas, la mujer goza de libertad de movimientos.
Puntos débiles
> Es una técnica experimental que, prácticamente, no se ofrece en ningún hospital ni en ninguna clínica.
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SCST
SCST
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Los masajes del papá te ayudan en el parto
Tu pareja también puede contribuir a aliviar los dolores del parto con su presencia y el toque de sus manos. Te describimos, paso a paso, cómo hacer delicados masajes en diferentes partes del cuerpo, que te ayudarán a sentirte mejor.
Han programado juntos la llegada del niño y compartido todo el período de espera y, ahora que llega el momento del parto, también deseas tener cerca a tu pareja. Además, el futuro padre puede ayudarte a vivir mejor el parto desde un punto de vista práctico. ¿Cómo? Realizándote un suave masaje. Solo el contacto de las manos es ya de por sí una importante medicina, puesto que, aparte de comunicar afecto, puede estimular también una mayor producción de endorfinas -unas sustancias que ayudan a resistir mejor el cansancio-. No obstante, antes del parto, puedes experimentar con tu pareja algún tipo de masaje, ya que no existe una receta válida para todas las futuras mamás. Algunas prefieren sentir presiones bastante fuertes en la piel, mientras que otras se inclinan por un toque ligero, casi imperceptible.
> ¿Cuál es el mejor momento para realizar el masaje? En la primera fase del parto, durante la contracción o en la pausa que se produce entre contracciones.
1 RELAJAR LOS MÚSCULOS DE LA CARA
> Apoyar los dedos índice, medio y anular de ambas manos en el arranque de la nariz, de modo que las yemas de los dedos de la mano derecha y las de la izquierda se toquen. Ejerciendo una ligera presión, deslizar lentamente los dedos hacia las sienes.
> Apoyar los dedos pulgar e índice de ambas manos en el centro de la barbilla y, ejerciendo una ligera presión, dibujar todo el arco de la mandíbula, subiendo hacia las orejas.
> Apoyar las yemas de los dedos índice y medio en el arranque de la nariz. Ir subiendo hasta la frente, efectuando toques muy ligeros.
> Ejercer una ligera presión en el centro de la frente y en las sienes con los dedos índice y medio.
2 RELAJAR EL CUELLO Y LOS HOMBROS
> Apoyar las yemas de los dedos de ambas manos en los lados del pliegue nucal (una pequeña depresión existente en la base del cráneo, en el principio del cuello), al lado de la columna vertebral. Descender hacia los hombros, efectuando movimientos circulares.
> Apoyar la palma de ambas manos sobre los hombros, en la base del cuello. Deslizar lentamente las manos hasta el extremo de los hombros.
> Apoyar los pulgares debajo de las escápulas (omóplatos), al lado de la columna vertebral, y ejercer una cierta presión durante algunos segundos. Deslizar los dedos y dirigirlos de nuevo hacia arriba, repitiendo la misma presión. Seguir subiendo, hasta llegar a la nuca.
3 ALIVIAR LA TENSIÓN EN LA ESPALDA
Acostada sobre un lado, con una pierna flexionada y la otra estirada:
> Masajear los haces musculares que discurren paralelos a la columna vertebral, efectuando ligeros movimientos con las yemas de los dedos, partiendo de la cintura para llegar hasta el cóccix.
> Apoyar la palma de la mano sobre la parte baja de la espalda y efectuar ligeros movimientos rotatorios sobre la zona del cóccix.
> Friccionar con las palmas de las manos la parte baja de la espalda, efectuando movimientos circulares lentos y suaves.
4 ELIMINAR LAS CONTRACCIONES DE MANOS Y BRAZOS
> Sujetar la base del pulgar haciendo “pinza” (entre los dedos índice y pulgar). Descender hasta la yema, efectuando presiones circulares. Repetir con el resto de los dedos.
> Ejercer ligeras presiones circulares en la palma de la mano, insistiendo sobre todo en la parte central. Según la medicina china, se trata de un punto vital que, si se estimula de forma adecuada, contribuye a disminuir la sensación de dolor.
> Hacer un masaje en el antebrazo mediante ligeras fricciones, partiendo de la muñeca hasta llegar al codo.
5 ALIVIAR LA PESADEZ DE LAS PIERNAS
> Estimular delicadamente con las yemas de los dedos la línea imaginaria que discurre por la parte exterior de la tibia (uno de los huesos de la pierna). Se parte de la rodilla hasta llegar al tobillo.
> Con las yemas de los dedos, efectuar un masaje en la parte interior de la pierna, avanzando a lo largo de la línea imaginaria que une el maléolo (tobillo) con el hueco de la rodilla.
> Rozar la parte exterior de los muslos, empleando toda la mano, partiendo de las rodillas y subiendo poco a poco hasta las caderas.
6 RECUPERAR LA CALMA Y EL BIENESTAR
> Agarrar el pie con ambas manos (efectuando una presa en forma de pulsera) y hacer un masaje en el dorso con los pulgares. Avanzar desde el arranque de los dedos hasta el “cuello” del pie, realizando ligeros movimientos circulares. Llevar a cabo el mismo masaje en la planta, procediendo desde su parte central hasta el talón.
> Cerrar la mano formando un puño. Ejerciendo una presión ligera, hacerla rodar sobre toda la planta, de forma que permita hacer un masaje con los nudillos.
> Tomar el dedo gordo del pie entre el pulgar y el índice de la mano, y estirarlo delicadamente. Hacer lo mismo con los demás dedos.
> Con el dedo pulgar, masajear la zona que va del tobillo al talón, tanto en la parte interna como en la externa del pie. En estos puntos, se reflejan los órganos genitales.
XTESTX
¿Cuánto sabes sobre las fases del parto?
Responde a las preguntas de nuestro test y descubre si conoces el proceso de parto y si estás preparada para el gran momento.
I1 El término “prodrómico” significa:
A. Que el cuello del útero todavía está cerrado.
B. Una fase que puede durar hasta dos o tres días.
C. Una serie de molestias que duran todo el noveno mes.
I2 La fase de dilatación:
A. Está caracterizada por la presencia de contracciones regulares.
B. Tiene una duración “fija”.
C. Es menos dolorosa que el período de expulsión.
I3 El período de expulsión:
A. Dura un minuto, aproximadamente.
B. Dura cerca de una hora.
C. Dura tres horas, aproximadamente.
I4 Las secundinas:
A. Se producen un minuto después del nacimiento del niño.
B. Se producen en los 5-30 minutos posteriores al nacimiento.
C. Se producen tres o cuatro horas después del parto.
1 B Puede durar hasta dos o tres días
Técnicamente, la fase prodrómica no constituye una verdadera etapa del parto, sino un momento preparatorio que precede a la dilatación. Puede empezar desde unas horas hasta dos o tres días antes de la dilatación. Su peculiaridad es la aparición de contracciones esporádicas, irregulares y de breve duración que pueden presentarse en diferentes momentos del día. Estas contracciones tienen la función de preparar el cuello del útero y aplanarlo, es decir, hacerlo más fino, hasta “borrarlo” cada vez más. A causa de estos cambios del cuello del útero, se puede producir la pérdida del tapón mucoso, una sustancia gelatinosa que, durante los nueve meses, ha mantenido el cérvix “cerrado”, aislando el útero del exterior. Por el mismo motivo, a menudo, también se produce la ruptura de la bolsa amniótica. Si el líquido es claro y transparente, no hay necesidad de preocuparse; todavía se puede permanecer en casa y prepararse con calma antes de ir al hospital.
2 A Se caracteriza por la presencia de contracciones regulares
La fase de dilatación empieza cuando las contracciones son más frecuentes y prolongadas, es decir, se presentan cada 3-5 minutos, con una duración de cerca de un minuto. Ahora, es el momento de dirigirse al hospital. Gracias a estas contracciones, mucho más dolorosas que las anteriores, comienza la denominada “fase de dilatación”, en la que se produce la apertura progresiva del cuello hasta alcanzar los 10 cm de diámetro. La duración de esta fase es de unas 6-8 horas para las mujeres primerizas, y de 4-5 horas para las que ya han tenido un parto anterior. Si no ha sucedido antes, la bolsa amniótica se rompe espontáneamente. En esta fase, el ginecólogo comprueba el bienestar del bebé a través de la monitorización fetal, que registra el ritmo cardiaco del bebé y las contracciones uterinas. Asimismo, el ginecólogo realiza exploraciones vaginales para comprobar que la dilatación se produce de forma regular.
3 B Dura una hora, aproximadamente
La fase de expulsión suele durar una hora en el caso de las primerizas, y una media hora en las mujeres que ya han dado a luz anteriormente. En un primer momento, la cabecita del bebé empieza a descender por el canal del parto. A lo largo del trayecto, el pequeño realiza algunos movimientos para adaptarse a la resistencia ejercida por los tejidos de la mamá. El primero de ellos es la reducción: la cabecita “contrae” su volumen y se flexiona hacia el tórax, de forma que pueda encarar el canal del parto. A continuación, sigue la progresión por la vagina y, a medida que el bebé desciende, la mamá advierte una fuerte sensación de presión: es la cabeza del bebé, que, al bajar, comprime las paredes sobre el hueso sacro. Con los últimos pujos, el bebé flexiona la cabeza hacia el exterior y, una vez fuera, vuelve a girar la cabecita, realizando una torsión del tronco que hará aparecer un hombro en primer lugar, después, el otro, y, finalmente, el resto del cuerpo.
4 B Se producen entre cinco y 30 minutos después del nacimiento
Es el último esfuerzo que tiene que realizar la mamá: las secundinas, o lo que es lo mismo, el “parto” de la placenta, que ha alimentado al bebé durante nueve meses. Es un proceso que se produce espontáneamente entre cinco y 30 minutos después del nacimiento del bebé, gracias a unas pequeñas contracciones menos dolorosas que las de la dilatación, y que el útero sigue realizando en esta fase. De esta manera, la placenta se desprende de las paredes del útero y, atravesando el canal del parto, sale por la vagina. En este momento, el ginecólogo examina la placenta, comprueba su integridad y se asegura de que no hayan quedado restos en el útero; posibilidad que podría provocar una hemorragia. Si el desprendimiento de la placenta no se produce una hora después del parto, el ginecólogo debe intervenir para provocar las secundinas de forma manual, con anestesia general.
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Los beneficios de la leche materna
Tu leche es el mejor regalo que puedes ofrecer a tu hijo. Además, dar el pecho también es bueno para ti. He aquí todos los beneficios que la lactancia materna tiene para la salud del bebé y de la mamá.
La leche materna no solo es beneficiosa para el bebé durante los meses en los que se alimenta al pecho, sino que el pequeño también “programa” su organismo para el futuro. Diversos estudios demuestran que la leche materna tiene efectos positivos a largo plazo con respecto a la presión arterial, la obesidad, el colesterol, la diabetes y las facultades cognitivas. Pero esto no es todo; dar el pecho también proporciona muchos beneficios para la mamá. Conozcámoslos a continuación.
1 EVITA LA OBESIDAD
> Las estadísticas demuestran que los niños que toman el pecho son menos propensos a padecer obesidad. El mérito es de los ácidos grasos Omega 3. Estas grasas, abundantes en la leche, figuran en la composición de las paredes de las células, haciendo que desarrollen una mayor actividad en la absorción de la leptina, una sustancia que contribuye a regular las sensaciones de hambre y saciedad, y que presenta disfunciones en muchos obesos.
> Gracias, también, a los ácidos Omega 3, disminuyen las probabilidades de sufrir hipertensión y colesterol elevado en la edad adulta. Estas grasas mejoran el funcionamiento de las paredes arteriales y contribuyen a elevar el nivel del colesterol HDL (el “bueno”, el protector), reduciendo, al mismo tiempo, el nivel del colesterol LDL (perjudicial para la salud). El efecto preventivo depende de la dosificación. Esto significa que el riesgo disminuye si se da el pecho durante más tiempo.
> La leche materna también combate la aparición de diabetes, tanto la de tipo 1 (que ya puede surgir durante la juventud) como la de tipo 2 (propia de la tercera edad).
2 EDUCA EN LA ALIMENTACIÓN
La lactancia materna es un método precoz de educación alimentaria que potencia la acción preventiva del sobrepeso, siempre que sea “a libre demanda”.
> Conviene estimular al niño para que exprese sus propias sensaciones y se autorregule, sin imponerle la necesidad de tener o no tener hambre a horas fijas, preestablecidas y válidas para todos. Además, la leche adquiere el sabor de los alimentos que la madre toma, hecho que representa un primer paso en el entrenamiento para reconocer y apreciar los distintos matices y las variaciones del gusto. Este es un itinerario que, después, proseguirá a lo largo del destete, de la introducción de las papillas y, posteriormente, de los primeros alimentos sólidos.
3 REFUERZA EL SISTEMA INMUNITARIO
Durante el primer año de vida, el sistema inmunitario del niño todavía no está preparado para defenderlo contra las agresiones externas.
> De todos modos, en los últimos meses de embarazo, la madre le ha pasado parte de sus anticuerpos. La lactancia materna es la continuación ideal de este proceso. ¿Cómo se produce esta transmisión? Es importante que, inmediatamente después del parto, el hijo comparta un mismo espacio con su madre. De esta forma, se favorece la relación entre ellos, al tiempo que se da a la madre la oportunidad de desarrollar anticuerpos específicos contra los microorganismos presentes en el ambiente y pasárselos al niño a través de la leche.
> Además de permitir el intercambio de anticuerpos, la leche también es un “tejido vivo” que contiene células activas del sistema inmunitario. Se trata de los linfocitos, considerados como “fábricas de anticuerpos” que transmiten su “memoria” al sistema inmunitario del bebé.
> Asimismo, la leche contiene sustancias antimicóticas, antivíricas y antibacterianas, y también hormonas que aceleran la maduración de las mucosas y de las paredes intestinales, protegiendo al pequeño de infecciones respiratorias, diarreas y otitis.
4 PROTEGE CONTRA LAS ALERGIAS
Las células del sistema inmunitario y las hormonas presentes en la leche materna sirven también para modular la llamada respuesta inflamatoria. Es decir, ayudan a “poner en guardia” al organismo en caso de peligro. De todos modos, regulan esta reacción para que no resulte excesiva, porque, de lo contrario, podrían predisponer al niño a sufrir alergias. Según diversos estudios, la lactancia materna protege mejor contra el asma, las dermatitis, las alergias alimentarias y la rinitis alérgica.
> Los oligosacáridos (azúcares) contribuyen también a este efecto protector. Están contenidos en la leche materna y “nutren” la flora bacteriana “buena” de los intestinos. Diferentes estudios han puesto de manifiesto que, en el intestino de los niños alimentados con leche materna, tienden a desarrollarse bacterias del tipo Bifidobacterium y Lactobacillus, ambas protectoras. Gracias a las sustancias presentes en la leche materna, que estimulan su proliferación, estas bacterias combaten la predisposición a sufrir dermatitis, eczemas y alergias de la piel.
5 BENEFICIOS PARA LA MADRE
Hoy en día, se ha demostrado que la lactancia materna constituye uno de los mejores aliados para la salud de la madre.
> Dar el pecho inmediatamente después del parto favorece la vuelta del útero a sus dimensiones normales y permite que la nueva mamá recupere su peso ideal en menos tiempo.
> Haber dado el pecho constituye también un factor protector contra los tumores de mama y de ovario. La protección es más elevada cuanto más se da el pecho y se refuerza si la mujer alimenta no solo al primer hijo, sino también a los siguientes.
> Asimismo, la lactancia materna hace más resistente el esqueleto y protege de una posible osteoporosis en una edad más avanzada.
6 FOMENTA LA RELACIÓN MADRE-HIJO
> La leche materna representa también un alimento emotivo y psicológico. Se trata de una experiencia existencial, más que nutritiva: ayuda al recién nacido a identificar a su madre y hace que, mientras toma el pecho, todos sus sentidos estén activos. De hecho, a través de la leche, pasan las endorfinas, opiáceos naturales del cerebro que favorecen la relajación y la sensación de bienestar. Asimismo, al dar el pecho, la madre se encariña con el niño, ya que su organismo libera oxitocina -una hormona que desarrolla la conducta maternal- durante la toma. Es algo parecido a escribir “te quiero” en el cerebro y en la sangre. En este sentido, se ha observado que, inyectando oxitocina en el cerebro de ratas vírgenes, éstas empiezan a cuidar a crías de otras hembras. Resumiendo, se puede decir que esta hormona es la responsable del sentimiento de apego, independientemente de cuál sea la naturaleza de la relación.
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Cómo cambiar el pañal al bebé
Esta es una de las primeras cosas que harás cuando nazca tu bebé ¡y que repetirás con frecuencia durante los próximos 2-3 años! Te explicamos, paso a paso, cómo debes hacerlo.
1 LOS PREPARATIVOS
Deja todo lo que necesitas para cambiar el pañal al pequeño al alcance de la mano. De este modo, como no tendrás que desplazarte, nunca lo dejarás solo. Quítale el mameluco o arremángale la camiseta hasta el pecho.
2 EXTIENDE EL PAÑAL LIMPIO
Levanta al niño por los tobillos. Desliza por debajo de sus nalgas, hasta la altura de los riñones, un pañal limpio bien extendido. Las sujeciones adhesivas deben quedar a la altura de su ombligo. Centra perfectamente el pañal debajo de las nalgas. Éste deberá permanecer debajo del niño hasta el final del cambio.
3 QUÍTALE EL PAÑAL SUCIO
Comprueba si debes cambiarlo (si el pequeño hizo pipí o popó) antes de quitarle el pañal. En caso de que así sea, separa los adhesivos laterales del pañal sucio doblándolos sobre sí mismos. A continuación, baja la parte delantera del pañal, que deberás doblar con cuidado.
4 LÍMPIALE LAS POMPIS
No debes quitarle el pañal sucio rápidamente. Simplemente, hay que desplazarlo, para que el niño quede sobre el pañal limpio. Después, límpiale debidamente las pompis, seca la piel de la zona y extiende bien la crema protectora.
5 PONLE EL PAÑAL LIMPIO
Extiende el pañal limpio. Pasa la parte delantera entre las piernas del pequeño. Comprueba que la parte delantera del pañal queda a la misma altura que la parte posterior antes de pegar los adhesivos. El pañal debe quedar bien liso.
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