EL TOP 10 DE PAPÁ

  1. Haz que tus hijos se sientan importantes y queridos. Demuéstrales tu cariño, no sólo les digas que los quieres.
  2. Responde a las llamadas de atención y a las señales que te envían tus hijos.
  3. Acepta a tus pequeños tal y como son.
  4. Incúlcales valores importantes como la honestidad, el respeto, etc.
  5. Utiliza la disciplina de forma constructiva. No es necesaria la violencia ni los gritos.
  6. Enséñales conductas, rutinas y prácticas útiles para que dispongan de estrategias en la vida.
  7. Involúcrate activamente en la educación de tus niños.
  8. Procura estar disponible cuando te necesiten.
  9. Ayuda a tu pareja y sé un ejemplo para tus pequeños.
  10. Date un tiempo para estar con tu niño a solas y conocerse mejor.

No seas un papá de domingo
Hoy en día, muchas parejas deciden separarse, sin embargo no por el hecho de que esto suceda, significa que los hijos deben perder contacto con los padres o verlos poco tiempo: un buen acuerdo logrará una buena armonía entre ambas partes. Un divorcio no debe cambiar la calidad en la relación con los niños. Papá debe ser un padre presente aunque ya no conviva con sus hijos. Que quede claro: el papá es tan importante como la mamá para el desarrollo del niño.

UNA CASA LIBRE DE GÉRMENES

La limpieza cuidadosa del ámbito doméstico resulta fundamental para evitar el riesgo de infecciones y reacciones alérgicas en los niños.

La casa es el ambiente en el que transcurrimos gran parte del día. Es donde los niños juegan, comen y aprenden a gatear. Para proteger su salud es necesario cuidar la higiene, precisamente, donde se concentra el mayor riesgo de infecciones y alergias: el suelo que pisamos con los zapatos procedentes del exterior, las superficies de juego, las destinadas a la preparación de la comida y el baño. También es necesario prestar mucha atención a las alfombras, los cojines, los colchones, los sofás, las camas, etcétera, ya que son los lugares preferidos de los ácaros del polvo. Es muy importante reducir la carga de bacterias en estas zonas de riesgo de la casa, especialmente, porque acostumbran a ser las más frecuentadas por los niños pequeños.

LA COCINA
Es uno de los sitios de la casa donde pasamos mayor parte del tiempo. Además, es la zona en la que se preparan los alimentos y en la que, algunas veces, damos de comer al niño. Por todo ello, es imprescindible mantenerla siempre reluciente y desinfectada. Se debe prestar especial atención a la mesa y a las superficies de apoyo de la cocina, ya que hay que evitar que las posibles bacterias patógenas (presentes, por ejemplo, en la carne cruda, la verdura sin lavar o las cáscaras de huevo) contaminen los alimentos, con el consiguiente riesgo de infecciones alimentarias.
Para limpiar este tipo de superficies, se aconseja el uso de productos sin cloro, para una mayor seguridad, al estar en contacto directo con los alimentos que se consumen.

REGLAS DE HIGIENE = A FAMILIA SANA

En los niños las rutinas diarias son la mejor forma de enseñarles hábitos, pero, también puedes explicarle los beneficios que le aporta el aseo diario, esto hará la tarea más fácil, relajada, divertida y lograrás que el pequeño disfrute de estos momentos. Además, si tú “predicas” con el ejemplo la tarea será más sencilla. Lograr que el niño tenga hábitos de limpieza no siempre es una tarea fácil, pues ellos no la consideran primordial; además, en ocasiones, creen que es un capricho de sus padres. Es importante que una vez que pongas en práctica estos hábitos seas constante y paciente. ¡Recuerda! utilizar la fuerza o los gritos no ayudará, estos solamente complicarán la situación.

Cuatro pasos básicos
  1. Enséñale a lavarse las manos después de ir al baño, antes de cada comida y cada vez que llegue a casa de la calle. También puedes explicarle que unas manitas sucias pueden causarle infección en el estómago o irritación en los ojos.

Bañarse es diario a pesar de que a esta edad tu hijo ya se baña solo, debes prestar atención a la manera en que lo hace, pues muchas veces no se lava bien las partes del cuerpo o el cabello. No olvides hacer revisiones periódicas y recalcar la importancia de la ducha.

Edúcalo a que 3 veces al día debe cepillarse los dientes. Cuando termine sus alimentos dile: “a lavarse la boca”, así lo ayudarás a crear una rutina; recuerda que un buen aseo bucal es fundamental, ya que las caries pueden permanecer en su dentadura definitiva.

UN HOGAR MÁS VERDE

Cuidar el medio ambiente es posible a través de pequeñas acciones hechas en casa. Promueve en tu familia hábitos ecológicos que permitan conservar un mundo sano.

AL MOMENTO DE COMER
No abuses del uso de vasos y platos desechables, aunque sean prácticos y cuando los adquieras prefiere aquellos que sean ecológicos.
SEPARA LOS RESIDUOS ORGÁNICOS E INORGÁNICOS
Pan, huesos, café, pasto, ramas, flores, etc. al biodegradarse se convierten en composta, que es un abono natural de gran utilidad para mejorar los suelos. Al separar la basura de forma correcta en tu hogar reduces la contaminación ambiental y disminuyes gases tóxicos como el metano que dañan al planeta. Como tip, adquiere botes de distintos colores para cada tipo de desperdicio.