A partir del primer año, tu hijo empieza a conquistar el mundo con sus propios pasos. Esta etapa es ideal para acompañarlo con juegos, rutinas y cuidados que estimulen su desarrollo motor, social y emocional. Aquí te explicamos cómo hacerlo, paso a paso.
Desde los 12 meses, los niños desarrollan nuevas habilidades: caminar, hablar, explorar su entorno, reconocer emociones y convivir con otros. Este proceso necesita más que tiempo: requiere estímulos adecuados y amor constante. Estimular su coordinación y desarrollo físico desde casa es una forma de acompañar su crecimiento.
Estas actividades prácticas y accesibles ayudan a fortalecer la motricidad, el equilibrio y la autoconfianza de tu hijo:
● Invítalo a caminar con apoyo y a empujar objetos ligeros.
● Juega a lanzar pelotas o globos para que los siga caminando.
● Proporciónale vasos o recipientes de distintos tamaños para encajar.
● Anímalo a caminar en zigzag, sobre líneas o en diferentes direcciones.
● Deja que camine descalzo sobre pasto, tapetes o superficies suaves.
● Realicen circuitos de almohadas o rampas pequeñas para trepar y bajar.
● Enséñale a caminar en puntas, saltar en un lugar fijo o sobre una línea recta.
● Jueguen a imitar animales o hagan movimientos con canciones.
● Motívalo a usar crayones y manipular objetos pequeños para su motricidad fina.
Además de las actividades físicas, el desarrollo necesita una buena base nutricional. A partir del año, los niños requieren una transición hacia una alimentación que respalde sus defensas, su crecimiento físico y su curiosidad natural.
En esta etapa, una opción como Nido Kinder 1+ (uno más) puede complementar su dieta diaria. Contiene:
● Probiótico L. rhamnosus, que apoya su sistema respiratorio e intestinal.
● Vitaminas A, C, D, zinc y selenio, que fortalecen su sistema inmune.
● Calcio y vitamina D, esenciales para su desarrollo motriz y óseo.
Es una alternativa pensada para niños mayores de un año que comienzan a explorar, tocar, jugar y exponerse a nuevos ambientes ya que brinda nutrimentos que apoyan a fortalecer su sistema inmune y motricidad.
No todo es físico. El lenguaje, la comprensión emocional y la socialización también se desarrollan intensamente en esta etapa:
● Lee cuentos y canta canciones con él.
● Háblale de sus emociones: triste, contento, enojado.
● Jueguen a adivinar sonidos o a nombrar objetos y colores.
● Permite que interactúe con otros niños en juegos libres.
Las interacciones cotidianas ayudan a formar una base emocional fuerte, clave para su seguridad personal.
No todos los niños siguen el mismo ritmo. Lo importante es que tu hijo:
● Explore y se mueva por iniciativa propia.
● Interactúe con su entorno y con personas.
● Use palabras o gestos para comunicar necesidades.
● Muestre alegría, curiosidad y ganas de aprender.
Si tienes dudas sobre su desarrollo, consulta con su pediatra o con especialistas en estimulación temprana.
El primer paso para estimular a tu hijo es estar presente. Acompáñalo con juegos, retos adecuados y actividades que lo motiven a moverse, pensar y comunicarse. Y no olvides que su alimentación es clave para lograrlo.
Nido Kinder 1+ es un aliado en este proceso, gracias a su formula especializada con nutrimentos que apoyan a fortalecer su sistema inmune, apoyar su motricidad y protegerlo en esta etapa de descubrimientos. Jugar , nutrir y amor: ese es el camino hacia un desarrollo pleno.
A partir del primer año de vida, los niños comienzan una nueva etapa de exploración en donde descubren nuevas cosas y también tienen nuevos retos en la alimentación. Si quieres saber cómo alimentarlo correctamente y fortalecer su sistema inmune, este artículo es para ti.
Cuando tu hijo cumple un año, su sistema digestivo está más desarrollado y puede comenzar a integrarse poco a poco a la dieta familiar. Sin embargo, esta transición no significa que ya pueda comer todo lo que comen los adultos. Los requerimientos nutricionales de los niños de 1 a 6 años siguen siendo muy específicos, pues su cuerpo y cerebro están en una etapa de crecimiento acelerado.
Durante esta etapa, los pequeños desarrollan su capacidad para masticar, tragar, identificar sabores y formar hábitos saludables que pueden acompañarlos toda la vida.
Aunque parezca que tu hijo ya puede comer “de todo”, lo cierto es que la alimentación de la familia no siempre cubre las necesidades de los más pequeños. Muchas veces consumen alimentos con azucares añadidos, sodio, grasas saturadas y alimentos con pocos nutrientes.
Además, los niños comienzan a explorar el mundo tocando todo, llevándose objetos a la boca y exponiéndose a bacterias constantemente. Por eso, necesitan una nutrición que fortalezca su sistema inmunológico, mejore su desarrollo físico y favorezca sus defensas naturales.
Una alimentación saludable debe ser variada y balanceada. Aquí te damos una guía básica de lo que no puede faltar en su dieta diaria:
● Proporcionan vitaminas, antioxidantes y fibra.
● Ofrécelas en distintas preparaciones: al vapor, cocidas, en trozos, puré o jugo natural.
● Pollo, pescado, carne magra, huevo y leguminosas (como lentejas o frijoles) son excelentes fuentes de hierro.
● El hierro es vital para prevenir la anemia y favorecer el desarrollo cognitivo.
● Avena, arroz integral, pasta de trigo, tortillas de maíz, etc.
● Son una buena fuente de energía para sus actividades diarias.
● En lugar de leche líquida común, elige alternativas como Nido Kinder 1+, que contiene una formula especializada ideal para esta etapa.
● Aguacate, aceite de oliva, nueces trituradas (sin riesgo de atragantamiento).
Nido Kinder 1+ está diseñada especialmente para niños mayores de 1 año, pues presenta una transición adecuada para continuar nutriéndolo con lo que realmente necesita en esta etapa.
● Fortalece el sistema inmune: gracias a su combinación de vitaminas A, C y D, además de zinc y selenio, nutrientes esenciales para que tu hijo pueda enfrentar los virus y bacterias a los que está expuesto en su entorno diario.
● Con probiótico L. rhamnosus: un aliado que contribuye a proteger el sistema respiratorio y el equilibrio de la microbiota intestinal.
● Apoya el desarrollo motriz: con calcio y vitamina D, esenciales para el fortalecimiento de huesos y músculos, claves en esta etapa donde comienza a correr, brincar, escalar y descubrir el mundo con su cuerpo.
Aunque la leche sigue siendo importante, es clave elegir una opción adecuada para su edad. Las leches liquidas familiares pueden tener proteínas difíciles de digerir y la cantidad de vitaminas y minerales que contienen puede no ser suficiente para esta edad de los niños.
Por eso, Nido Kinder 1+ es la transición ideal: Le proporciona los nutrimentos adecuados para su edad. La cantidad recomendada es de 240 ml a 480ml al dia (2 vasitos) en un vaso entrenador.
● Establece horarios regulares de comida para generar hábitos.
● Haz 3 comidas principales y 2 snacks saludables al día.
● Comer juntos refuerza la convivencia y permite que tu hijo te imite y aprenda buenos hábitos alimenticios.
● Deja que use la cuchara, el vasito entrenador y que toque la comida. Sí, aunque se ensucie. Eso también es aprendizaje.
● Evitar las bebidas azucaradas y dulces.
● Evita alimentos que puedan representar riesgo de asfixia: uvas enteras, cacahuates, palomitas, zanahoria cruda.
Recuerda que cada niño es diferente. Algunos comen mucho un día y poco al siguiente. Es normal. Lo importante es observar:
● Si tiene energía para jugar.
● Si duerme bien.
● Si su crecimiento es adecuado.
● Si tiene buen ánimo y pocas enfermedades.
Ante dudas específicas, siempre es recomendable hablar con su pediatra o un nutriólogo infantil.
Alimentar a tu hijo después del primer año es una oportunidad para formar hábitos saludables, fortalecer su sistema inmune y prepararlo para los grandes retos del crecimiento. Una nutrición adecuada, rica en vitaminas, minerales, probióticos y proteínas de calidad, puede marcar una gran diferencia en su desarrollo físico, cognitivo y emocional.
El cuidado de los dientes es uno de los temas que más preocupan a las mamás y papás. ¡Y con razón! La salud bucal está directamente relacionada con el bienestar general. Por eso, establecer buenos hábitos desde los primeros años es clave para un desarrollo saludable.
La erupción dental comienza hacia los seis meses con los incisivos inferiores. Después, siguen los superiores, los laterales y, entre los 12 y 18 meses, los primeros molares. A partir de los 18 meses, aparecen los caninos y, hacia los tres años, los segundos molares completan la dentición de leche.
Durante esta etapa es común ver inflamación en las encías, irritabilidad y menor apetito debido al malestar. Contrario a lo que muchos creen, la salida de dientes no causa fiebre alta. Si tu hijo presenta fiebre elevada, es mejor consultar con su pediatra.
Lo más recomendable son mordederas frías o dedales de silicona para masajear la encía. También puedes ofrecerle paletas de leche materna o fruta natural sin azúcar. Evita el uso de geles anestésicos o cremas bucales, ya que no son efectivas y pueden tener efectos adversos.
Desde el primer diente. Es importante usar un cepillo pequeño de cerdas suaves y una pequeña cantidad de pasta dental con flúor (mínimo 1,000 ppm). No es necesario hacer nada antes de que erupcionen los dientes.
● Dientes en erupción: medio granito de arroz.
● Dentición completa (hasta 3 años): un granito entero.
● De 3 a 6 años: tamaño de una lenteja.
Aunque no sepan escupir, las cantidades controladas son seguras. La pasta dental debe ser administrada siempre por un adulto, como si fuera un “jarabe de los dientes”.
La caries es una enfermedad relacionada con el consumo de azúcares libres. Por eso, es vital ofrecer alimentos frescos como frutas, verduras y cereales integrales. Los alimentos crujientes como la manzana ayudan a limpiar los dientes de forma natural, mientras que los pegajosos (como frutas secas) tienden a quedarse entre los dientes y favorecer la aparición de caries.
Aquí es donde entra en juego la nutrición especializada. A partir del año, es importante ofrecer opciones que, además de alimentar, fortalezcan los dientes, huesos y defensas. Nido Kinder 1+ no contiene azúcar añadida y esta formulada especialmente para niños en esta etapa ya que contiene:
● Calcio y vitamina D, que apoyan el desarrollo de dientes y huesos fuertes.
● Probiótico L. rhamnosus, que ayuda a fortalecer el sistema respiratorio e inmune.
● Vitaminas A, C, D, zinc y selenio, para proteger el organismo durante el crecimiento.
Elegir alimentos y bebidas fortificadas puede marcar una diferencia en la salud bucal y general de tu hijo.
Para prevenir complicaciones:
● Cepilla los dientes a diario desde el primer diente.
● Asegúrate de que la pasta tenga suficiente flúor.
● Acude con regularidad al odontopediatra.
La clave está en ver lo que se está haciendo. Colócate detrás del niño, sujeta su cabeza con una mano y usa la otra para cepillar. Realiza movimientos de barrido: de encía hacia el diente. Cepilla dos veces al día: mañana y noche, e idealmente también después de comer.
Cuidar la salud bucal de tu hijo comienza desde el primer diente y no se trata solo de cepillar: también se trata de lo que come y bebe. Alimentos sin azúcares añadidos, hábitos correctos y productos diseñados para esta etapa hacen la diferencia.
Y si buscas una opción que complemente su desarrollo y lo proteja en su crecimiento, Nido Kinder 1+ es una excelente alternativa ya que con sus nutrimentos apoya a fortalecer su sistema inmune y apoyar el bienestar de sus dientes y huesos.